
El 2025 fue un punto de inflexión para la industria naval, impulsado por una alianza estratégica con Hyundai Heavy Industries, según la empresa estatal de Servicios Industriales de la Marina (SIMA). De cara al 2026 se esperan completar al menos cuatro proyectos, siendo tres de ellos de construcción.
En conversación con Gestión, Luis Silva, gerente general de SIMA, destacó que no solo se busca construir barcos para la Marina de Guerra del Perú, sino reactivar toda una cadena productiva nacional que había perdido fuerza en décadas pasadas.
“Hemos logrado una performance sólida tanto en construcción como en reparaciones navales, incorporando tecnologías de última generación, nuevas metodologías de ingeniería y sistemas de planificación más eficientes. Cerramos el año con un crecimiento sostenido en ejecución de proyectos, avances significativos en nuevas construcciones y una articulación cada vez más estrecha con Hyundai Heavy Industries”, comentó a Gestión.
Con este fortalecimiento de sus procesos, recientemente se ha invertido cerca de S/ 2,800 millones en cuatro de los principales proyectos que continuarán desarrollándose en el 2026.
De ese total, entre el 30% a 35% permanece en el Perú a través de la contratación de bienes, servicios y mano de obra peruana con empresas de metalmecánica, proveedores de equipamiento y técnicos locales.
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¿Cuáles son los proyectos que despegarán en 2026?
El avance más próximo de SIMA involucra a dos buques auxiliares logísticos que actualmente se encuentran construidos al 50%, que al finalizar el próximo año estarán totalmente listos.
Silva explicó que el proceso de construcción naval tiene etapas: primero se termina el casco y se lanza al agua en un evento conocido como “botadura”, para luego pasar a los acabados finales. Para estas naves logísticas, la botadura está programada para mayo o junio del próximo año.
“El reto está en que estos dos buques auxiliares logísticos se entreguen a fines del próximo año“, sostuvo.
Otro proyecto próximo a entregarse es la modernización del segundo submarino a la Marina de Guerra.
Pero, no solo trabajan en proyectos para la Marina en El Callao, pues la industria naval peruana también está atendiendo al sector privado en otras regiones del país.
En el centro de operaciones de Iquitos (Loreto), por ejemplo, se está construyendo una embarcación turística fluvial para una empresa privada. Este proyecto es otro de los que verán la luz en el corto plazo, pues se espera que dicha nave sea entregada en el segundo semestre del 2026.

Proyecto a futuro
No todos los proyectos que tienen en agenda estarán listos en 2026 debido a su alta complejidad tecnológica. Uno de los principales proyectos del SIMA tardará unos 4 años más.
Silva explicó que el Perú ha iniciado la construcción de una fragata multirol, un buque de guerra que cuenta con sistemas de misiles, radares y tecnología de punta, algo que no se hacía en el país desde hace 40 años.
“Eso sí nos va a demorar. Debemos estar entregándolo a fin del 2029. Ese es el gran reto tecnológico que tenemos”, refirió.
Actualmente, este proyecto se encuentra en una fase inicial, con un avance de entre el 5% y el 6%, centrado en el corte de los módulos metálicos.
Además, el representante de SIMA resaltó que se ha iniciado la construcción de una patrullera oceánica que demorarán entre 2.5 a 3 años.
En tanto, se tiene programado el inicio de la construcción del nuevo Buque de Investigación Científica Pesquera para el Instituto del Mar del Perú (Imarpe), un proyecto fundamental para el conocimiento oceánico y la sostenibilidad del sector pesquero.
“Eso va a mejorar su capacidad de investigación científica para la evaluación de nuestros recursos hidrobiológicos y su sostenibilidad. Estas embarcaciones hacen todo un estudio biológico para abrir o levantar las vedas para poder pescar”, refirió.
Con miras al próximo hub
Más allá de la construcción de buques para la defensa y la pesca, el representante SIMA indicó que existe una visión estratégica de Estado que vincula a la industria naval con el desarrollo portuario comercial, consolidando el eje Callao-Chancay.
Actualmente el único dique seco disponible en el Callao data de 1938 y fue diseñado para los buques de esa época, que medían unos 190 metros de largo por 26 de ancho. Hoy, los modernos buques Neo Panamax superan los 400 metros de largo y 60 de ancho, por lo que no pueden ser atendidos en las instalaciones actuales.
“Esos buques ya no pueden ingresar a nuestro dique seco. Para eso, con una visión estratégica de consolidar como hub portuario al Callao, se necesita esa construcción”, refirió.
Otras estrategias de SIMA a futuro también contemplan la construcción de buques mercantes y la renovación de la flota pesquera, que tienen una antigüedad promedio de más de 40 años.
Adicionalmente, Silva consideró qué hay un potencial considerable que abre oportunidades para exportar embarcaciones y servicios especializados de reparación y modernización, particularmente por la demanda de patrulleras marítimas, fluviales y servicios de mantenimiento avanzado.

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de San Martín de Porres con experiencia en radio, tv, redes sociales y medios impresos. Escribo y hablo sobre economía y finanzas desde el 2020.








