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Brasil, el mayor exportador del mundo de carne de res, detuvo el jueves las exportaciones de carnes rojas a China después de confirmar un caso de la enfermedad animal conocida como “vaca loca”.
El caso de encefalopatía espongiforme bovina fue confirmado el miércoles por el Ministerio de Agricultura de Brasil, y los envíos a China se suspendieron como parte de un protocolo comercial entre las dos naciones. Las autoridades brasileñas sostendrán conversaciones con sus homólogos chinos para lograr un “rápido restablecimiento” de los flujos comerciales, dijo el Ministerio en un comunicado.
China, el principal destino de la carne vacuna brasileña, representa cerca del 60% de las exportaciones del país. Brasil también fue el principal proveedor de carne de res de China el año pasado, por adelante de Argentina y Uruguay, los que podrían impulsar sus exportaciones a China mientras Brasil se mantiene al margen. Lo mismo le puede pasar a Australia si se aceleran las conversaciones para reducir las restricciones de Pekín sobre la carne australiana.
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La suspensión de las exportaciones es un duro golpe para algunas de las principales empacadoras de carne del mundo, incluidas JBS S.A., Marfrig Global Foods y Minerva SA. Después de caer el miércoles antes de la confirmación del caso de vaca loca, las acciones de JBS y Minerva subieron el jueves en São Paulo. Minerva dijo que seguirá atendiendo la demanda china a través de plantas en Uruguay y Argentina.
JBS podría hacer lo mismo utilizando instalaciones en Australia, mientras que es probable que Marfrig siga exportando a China desde Uruguay y Argentina, según Leonardo Alencar, analista de XP Investimentos.
Se enviaron muestras del animal infectado a un laboratorio en Alberta, Canadá, para determinar si el caso es “atípico”. La variedad atípica difiere de la “clásica” relacionada con la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob en las personas. Un caso atípico generalmente también significa que el animal contrajo la enfermedad espontáneamente en lugar de haberlo hecho por comer harina de carne y huesos contaminados. Brasil nunca ha reportado un caso de vaca loca “clásico”.
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Se espera que la prohibición de envíos a China dure poco tiempo si el caso es atípico, dijo Pan Chenjun, analista sénior de Rabobank. Aun así, habrá un impacto significativo mientras tanto porque Brasil es un proveedor muy grande. Otros exportadores sudamericanos pueden beneficiarse, ya que ofrecen productos similares.
La Aduana de China, el Ministerio de Comercio y el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales no respondieron de inmediato a los faxes en busca de comentarios.
