El ministro español de Industria, Comercio y Turismo en funciones, Héctor Gómez Hernández, afirmó este martes en el Parlamento Europeo que cada semana hay progresos “a paso de gigante” para cerrar este año el anexo con medidas medioambientales que acompaña al acuerdo de asociación entre la Unión Europea (UE) y Mercosur.
“El diálogo es permanente, todas las semanas estamos avanzando, diría que a pasos de gigante, para acercar posiciones”, indicó Gómez ante la Comisión de Comercio Internacional de la Eurocámara, en la que presentó las prioridades de la presidencia española del Consejo de la UE para este semestre.
El ministro español expresó su “optimismo” en la negociación del acuerdo con el Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) y dejó claro que durante la presidencia van a multiplicar los esfuerzos.
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“Por los contactos y los avances que se están dando en las últimas fechas, creemos y consideramos que se puede alcanzar un acuerdo, que se va a alcanzar un acuerdo en este semestre” sobre el anexo medioambiental, dijo, de cara a poder tener completado el acuerdo de asociación en 2024, “si es posible en el primer semestre o cuando se den las condiciones”.
Señaló que mantienen la ambición y el realismo para lograr este acuerdo que se negocia desde hace más de 20 años.
La Comisión Europea recibió la semana pasada del Mercosur su respuesta a las nuevas exigencias ambientales presentadas por la UE a comienzos del año, que plantean la posibilidad de imponer sanciones y restricciones al comercio por el incumplimiento de sus requisitos ambientales.
El ministro español en funciones aseguro que “no existe preocupación” por declaraciones críticas con el acuerdo procedentes de dirigentes como el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva: “Lo consideramos como una oportunidad para mover el acuerdo y poder provocar de una vez el entendimiento”, apuntó.
Más avanzados se encuentran los acuerdos comerciales con Chile y México, que Gómez confió en que puedan firmarse antes de que concluya el año.
Gómez puso en valor los tratados de libre comercio bilaterales que la UE impulsa con otros países y regiones del mundo, que ofrecen una “oportunidad inmejorable para promover los valores europeos fuera de la Unión”.
El ministro español afirmo que la UE afronta “meses cruciales” en un “contexto geopolítico marcado por la incertidumbre, complejo”, a causa de la guerra en Ucrania o por todavía las consecuencias de la pandemia, en el que Europa debe convertirse en escenario de “absoluta certeza”.
Mencionó igualmente la competencia estratégica entre EE.UU. y China y la inestabilidad en África a causa principalmente de los últimos golpes de Estado en países del Sahel.
En ese contexto, aseguró que la presidencia española de la UE va a defender la autonomía estratégica abierta de la UE, mientras el bloque sigue mejorando el acceso a los recursos y materias primas que necesitan y el acceso a los mercados internacionales aplicando siempre “los más altos estándares”.
Alertó al mismo tiempo del riesgo de ignorar los retos de la globalización y del desarrollo de medidas proteccionistas “que llevarían al retroceso económico y social”.
“En el ámbito multilateral, resulta cada vez más acuciante la necesidad de reformar el sistema de comercio multilateral basado en normas, en un mundo cada vez más polarizado”, advirtió.
Gómez afirmó que la presidencia española “no escatimará esfuerzos en ello” y que considera “prioritaria” la reforma de la Organización Mundial del Comercio y la recuperación de un órgano de resolución de diferencias “plenamente operativo”.
El ministro puso de relieve asimismo el “elevado grado de integración económica” con Estados Unidos y confió en poder lograr un acuerdo sobre minerales críticos, así como un pacto global sobre acero y aluminio sostenibles.
En cuanto a China, otro “socio comercial de primer nivel” de la UE, reconoció que las relaciones con ese país son “complejas y se enmarcan en un contexto geopolítico global cada vez más inestable”.
Por lo que se refiere a la seguridad, Gómez destacó el compromiso de la presidencia española para proteger los sectores estratégicos y, sobre la propuesta regulación contra los bienes manufacturados con trabajo forzoso, garantizó un “esfuerzo titánico” por darle un impulso.
Fuente: EFE
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