El mercado de minialmacenes es relativamente nuevo en el Perú. El primer local abierto con este fin se reporta en el año 2015 y hoy se registran nueve edificios en seis distritos de Lima, según información de la consultora Binswanger.
Como su nombre lo indica, los minialmacenes son espacios pequeños -en la zona urbana de Lima se encuentran desde 1 m2 y el tamaño promedio es de 6 m2, reporta Binswanger- donde las personas pueden guardar cualquier tipo de objetos de valor. Este servicio también es usado por las pequeñas empresas para guardar su mercadería.
En la zona urbana, Binswanger identifica seis edificios de minialmacenes, en San Isidro (2), Surco (2) y La Victoria (2). También existe una oferta de tres locales a la salida sur de Lima. En el 2022 se registraron 4,000 minialmacenes, con un área arrendable total de 30,300 m2 (el 85% de la oferta en la zona urbana).
Existe un importante potencial de crecimiento de este naciente mercado, indica Juan Ruiz, jefe de Investigación de Mercados de Binswanger, debido a la tendencia de reducción de los tamaños de los departamentos, por lo que las familias requieren de espacios para depósitos.
“Y el segundo factor es el crecimiento del comercio electrónico. Lo cual ha generado la necesidad de que las pymes busquen ubicaciones estratégicas para distribuir sus productos”, subrayó Ruiz.
Propietarios
El reporte de Binswanger señala que el principal propietario de minialmacenes de Lima es Deposeguro, que cuenta con 3 locales, en Surco y La Victoria. El segundo es The Safe Storage, que posee dos edificios en San Isidro.
“En el caso de las personas, la demanda es sobre todo para guardar artículos de colección o también algunos artículos de valor sentimental”, refiere Diego Valdez, gerente de The Safe Storage.
“La pandemia aumentó la demanda de las empresas que venden vía e-commerce. Algunas requieren el servicio de forma temporal, por campaña. Por ejemplo, para Navidad importarán más juguetes y necesitarán un nuevo depósito o ampliar el que ya tienen”, agregó.
Por su parte, María José Ballen, gerente comercial de Bluebox Depósitos, que cuenta con uno en La Victoria, señala que la mitad de los clientes son personas naturales y la otra mitad empresas.
“A raíz de la pandemia creció la demanda. Hemos tenido personas naturales que estaban cambiando de domicilio y debían guardar sus cosas de casa en algún lugar seguro. También hemos tenido empresas que estaban dejando de operar y aún no habían vendido sus activos. También hemos tenido clientes que han aumentado inventario y pequeñas empresas que estaban iniciando operaciones y necesitaban un lugar central en la ciudad”, refirió.
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Hacia futuro, se estima que la oferta de minialmacenes crecerá. Binswanger señala que existe un edificio en construcción situado en Ate y otro proyecto aún en fase de desarrollo en el Callao.
“Hay varios fondos de inversión interesados en este mercado. Sabemos de un fondo chileno que busca entrar. Chile está bastante desarrollado, ya tiene 80 edificios. Lo más probable es que surjan nuevos actores el 2023 y 2024. Hay potencial de que Perú crezca como en Chile”, señaló Ruiz.
En el caso de Bluebox Depósitos, está construyendo un nuevo local en Los Olivos. La primera fase del proyecto estaría terminada en seis meses. “Estamos construyendo un nuevo local con miras a ser un socio para aquellas empresas que requieren apoyo en la última milla”, agregó Ballen.
Por su parte, Valdez refiere que vienen evaluando abrir un nuevo edificio. “Estamos analizando distintas zonas de Lima Moderna y Lima Top, para acercarnos a nuestros clientes. El 70% de nuestros clientes vive en una zona de alrededor de 1 km de distancia de nuestras sedes”.
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Precios
Los precios de renta de los minialmacenes se han mantenido estables en US$ 25 por m2 en promedio en la zona urbana de Lima, reporta Binswanger.
Estima que esta tendencia se mantendría el próximo año. “Esperamos estabilidad en las tarifas para el 2023, debido a que es un mercado en pleno crecimiento y necesita captar más demanda, además se sigue apostando por promociones para contratos más extensos”, anotó Ruiz.
Agrega que actualmente el nivel de ocupación de los minialmacenes se ubica en 70% en todo el mercado. Si bien lo considera un nivel óptimo, estima que recién cuando la ocupación supere el 90% podría empezar a verse un alza de las tarifas.