La empresa de seguridad G4S prefiere la cautela en torno a sus proyecciones para este año; ello, en un entorno de convulsión social que afecta a todo el sector empresarial, pero que no ha impactado en una solicitud intensiva de vigilancia interna.
La presidenta ejecutiva para Perú de esta compañía, Maricarmen Fedalto, señaló que, si bien, las protestas y hechos de violencia se profundizaron en las últimas semanas, el requerimiento de personal por parte de los clientes, principalmente, compañías mineras, no tuvo una variación importante, toda vez que el foco viene más por reforzar sus dispositivos de seguridad antes que dotarse de un significativo número de elementos de seguridad.
“Las empresas formales a las que le brindamos el servicio ya cuentan con un dispositivo de seguridad bien estructurado; por ello, lo que se ha hecho en muchos de los casos, es utilizar los planes de contingencia ya diseñados para situaciones críticas”, explicó la representante.
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De este modo, Fedalto estimó que la demanda de personal de seguridad realizada por los clientes ha crecido apenas un 5% en esta última etapa, y, por ello, no han requerido aumentar su equipo de 10.000 colaboradores a nivel nacional. Por el contrario, un beneficio que sí solicitan es estar permanentemente informadas sobre lo que está sucediendo en el país.
“Y esto sucede con todos nuestros clientes, pues la situación que pasamos no se focaliza solo en el sur, sino en varias zonas”, expresó.
Planes
El año pasado, G4S alcanzó los niveles de facturación del 2019; sin embargo, lo que sí aún no recupera son las cifras de rentabilidad de prepandemia, entre otras causas, por una serie de regulaciones, principalmente, laborales que perjudicaron los márgenes, según Fedalto.
En esa línea, los planes para el 2023 se orientan a una mayor presencia de soluciones tecnológicas, cuyo servicio se vincula con la implementación de cámaras de seguridad, reconocimiento facial, control de ingresos y similares. El fin es lograr posicionar servicios conjuntos de seguridad física y tecnológica.
“El año pasado hemos aumentado más del 50% en servicio de seguridad tecnológica, aunque teníamos planeado crecer más. No obstante, somos conscientes que esto significa inversiones importantes en las compañías, que es lo que en este momento se ha detenido un poco por la actual coyuntura”, manifestó.
Respecto a nuevas inversiones, la empresaria afirmó que los desembolsos más importantes se efectuaron en los últimos años, siendo destinados, principalmente, a equipos de cómputo y sistemas. En adelante, la empresa busca continuar afianzándose en el mercado con un crecimiento de su cartera de clientes, sobre todo, en el sector minero, que es el segundo actor más importante para la compañía, después del financiero.
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Informalidad
La representante de G4S lamentó el aumento de compañías que contratan con empresas de seguridad informales, cuya situación no permite una competencia pareja en el mercado, sobre todo, porque los “costos asociados” son altos para los formales.
“Los márgenes en las empresas de seguridad son bien pequeños; no hay forma de reducir el margen para competir en el mercado. El costo de reclutamiento de la persona, de capacitación, de licencia de armas, carné de Sucamec, examen médico ocupacional, revisión de antecedentes penales, y demás, todo eso tiene un costo. Estos costos no tienen las empresas informales porque colocan a cualquier persona”, anotó la empresaria, quien dijo que las tarifas de un informal con respecto a un formal pueden ser de incluso 15% menos.
Claves
Representatividad. La seguridad física representa el 95% de la facturación de G4S; en tanto, que la tecnológica figura con un 5%.
Mercado. Fedalto sostuvo que en Sucamec, existen alrededor de 1,000 empresas registradas. “Solo aproximadamente el 30% somos formales. Creo que es muy importante tomar la decisión de sobre quiénes pones tu seguridad”, reiteró.
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