A puertas de concluir el 2024, la Asociación de Productores de Cítricos del Perú (Procitrus) informó que, entre enero y noviembre, las exportaciones peruanas de cítricos, incluyendo mandarinas, naranjas, tangelos, toronjas y limones, sumaron 293,413 toneladas. Dicha cifra representa un incremento del 20% en comparación con las 245,180 toneladas registradas en el mismo periodo de 2023.
El gerente general de Procitrus, Sergio del Castillo, atribuyó tal crecimiento a “la recuperación productiva de las plantaciones”. Asimismo, resaltó que 223,099 toneladas del total exportado correspondieron a mandarinas, representando el 76% del volumen total y estableciendo un récord histórico desde 2020. Dicho resultado refleja un aumento del 17% en comparación con las 188,512 toneladas enviadas en 2023.
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Respecto a los mercados de cítricos, Estados Unidos fue el primer destino con 143,328 toneladas (48.85% del total), de las cuales 123,000 t fueron mandarinas, representando el 55% de este segmento. Por su parte, Europa recibió 49,009 toneladas, un incremento del 3%, aunque su participación cayó a 19%.
En tanto, Reino Unido importó 26,226 toneladas, 8% menos que las 28,489 toneladas de 2023, reduciendo su participación de 12% a 9%. Por otro lado, Rusia mostró un crecimiento del 9%, al pasar de 4,045 toneladas en 2023 a 4,416 en 2024, manteniendo una participación del 2%. México destacó con un incremento del 120%, duplicando sus despachos de 10,000 toneladas a 22,000 toneladas. En contraste, Canadá experimentó una caída del 19%, reduciendo sus compras de 13,445 toneladas en 2023 a 10,887 en 2024.
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A Centroamérica, las exportaciones aumentaron 61%, mientras que en Asia, específicamente China y Japón, se registró una significativa contracción del 66%, pasando de 15,010 toneladas en 2023 a 5,065 toneladas en 2024, lo que redujo su participación del 6% al 2%. En la campaña de este año, el ejecutivo comentó que priorizaron los mercados más cercanos, debido a que “la fruta llega mejor en los tránsitos cortos”. A esta situación, se añadió el esfuerzo de los equipos comerciales de agroexportadores peruanos que han “diversificado los destinos de la fruta”.
¿Qué pasó con la mandarina Satsuma?
En cuanto a las mandarinas tempranas (Satsuma Iwasaki), Sergio del Castillo informó que las exportaciones sufrieron una caída del 58% en comparación con 2023, al pasar de 30,000 toneladas a solo 12,000 toneladas. Dicho retroceso se atribuyó a los efectos climáticos adversos registrados en 2023. Sin embargo, el ejecutivo proyectó una recuperación para 2025.
Por otro lado, destacó que las mandarinas tardías han sido el motor detrás del crecimiento general de las exportaciones de este cítrico desde Perú. Según sus estimaciones, 2025 podría ser un año favorable para las mandarinas, siempre y cuando no se presenten problemas climáticos. En contraste, la situación del limón genera preocupación.
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Del Castillo advirtió que la principal zona productora, Piura, enfrenta una severa sequía, lo que representa un riesgo para las exportaciones de este fruto.