El rubro de bienes raíces ofrece diversas formas para rentabilizar un capital como intereses de préstamos o inversiones indirectas.
Sin embargo, data de SOHO Inmobiliaria, indica que la compra de inmuebles para alquileres de corto y mediano plazo se ha vuelto una de las tendencias que ha ganado el interés de inversionistas este 2022, principalmente por el flujo constante ingresos que otorga al comprador.
“Los departamentos de 80 m2 en Miraflores obtienen una renta neta mensual de entre US$ 1,200 y US$ 1,500 bajo el formato de alquileres variables; es decir, mediante alquileres para periodos de tiempo corto en plataformas como Airbnb”, señaló Jorge Fernández, director ejecutivo de la empresa.
Modelo de inversión
Este tipo de inversión requiere un capital de entre el 20% y 30% del costo total del inmueble. Los bienes listos para ser entregados se deben poner en alquiler para que el cobro de este cubra, en gran parte o en su totalidad, el monto de la cuota que se debe abonar mensualmente por la compra del inmueble.
Si el proyecto aún está en construcción, una modalidad con gran oportunidad es la de buscar inmuebles en venta con contratos de arrendamiento (de renta mensual fija) para determinados periodos de tiempo, los cuales son garantizados por la inmobiliaria.
Perfil de inquilinos
Los arrendatarios usuales de este tipo de inmuebles son los turistas; sin embargo, este 2022 ha habido una importante demanda de ejecutivos y nómadas digitales buscando alquileres flexibles que les permitan desplazarse entre ciudades e incluso países. Otro público potencial de este tipo de alquileres son los jóvenes que buscan la experiencia de independizarse.
En lo referente a las características que agregan valor a un inmueble ante el interés de posibles arrendatarios está la cantidad de habitaciones dentro del área de departamento, así como demás aspectos de distribución interna y prestaciones. Adicionalmente, este tipo de inquilinos valoran espacios y áreas comunes como un gimnasio y salas de coworking o sociales.