En Íllimo, Lambayeque, es de adobe y el desborde del río La Leche ha debilitado sus estructuras. Las familias afectadas piden ayuda porque han perdido alimentos y enseres. Temen nuevas inundaciones.
En Íllimo, Lambayeque, es de adobe y el desborde del río La Leche ha debilitado sus estructuras. Las familias afectadas piden ayuda porque han perdido alimentos y enseres. Temen nuevas inundaciones.

Los productores de mango, desde Casma hacia el norte, se encuentran en una situación crítica: casi al cierre de campaña de exportación detuvieron sus envíos debido al ciclón Yaku. “Hay una preocupación financiera porque la fruta está parada”, dice Eli Bustinza, gerente general de Frío Aéreo. Al igual que los productores agrícolas, miles de negocios y comercios en el norte del país afrontan también el desafío de honrar sus deudas en pleno azote de las lluvias y la cercanía de la fecha de pago.