Decenas de peruanos se reunieron este domingo en la ciudad de Miami Beach (Florida, EE.UU.) para protestar contra el supuesto “fraude” electoral en Perú y el candidato presidencial izquierdista, Pedro Castillo, y para solicitar al Gobierno de su país que “todos” los votos sean contados.
Con gritos de “democracia sí, comunismo no” y muchos de ellos vestidos con la camiseta de la selección nacional de fútbol, los peruanos se reunieron en una esquina cercana al Centro de Convenciones de Miami Beach cuando se cumple una semana de las elecciones presidenciales en su país sin resultados oficiales a la vista.
Cargando un cartel que decía “no permitas que nos roben el futuro del Perú”, Catalina Ferradas dijo a Efe que se unió a la protesta en defensa de la democracia y contra el “partido del lápiz”, en referencia al Partido Libre, de Castillo.
Sara Cahuachihuachi, que la acompañaba, aseguró que los comunistas van a “destruir” a Perú “al igual que (lo han hecho en) los demás países” de Suramérica.
Por ahora, el recuento deja a Castillo como el candidato más votado, pero se desconoce cuándo la corte electoral promulgará al ganador, mientras su contrincante de derecha, Keiko Fujimori, ha solicitado anular cerca de 200.000 votos y clama por un supuesto “fraude en mesa”.
“Las elecciones no están acatando lo que deberían acatar porque democracia es poder hacer valer el derecho de las personas y cuando hay un fraude no se ve eso, y lógicamente no apoyamos al comunismo”, expresó por su parte Lucy P. Cáceres.
Subrayó que reclaman a las organizaciones electorales el recuento “televisivo” y que el voto de todos cuente.
“Estamos defendiendo la democracia. No porque estamos lejos no nos importa la democracia”, manifestó por su parte Patricia Vilchez. “Yo acepto (un ganador) si todo es en orden y cuentan los votos, pero por favor que prevalezca la democracia”, agregó.
La peruana instó a la Oficina Nacional de Elecciones (ONPE) y al Jurado Nacional Electoral (JNE) a “hacer prevalecer el voto verdadero”.
Con el 99,935 % de los sufragios escrutados, Castillo saca 49.420 votos de ventaja sobre Fujimori.
El recuento se prolonga ya por una semana, si bien desde el pasado lunes está claro que la ventaja del maestro rural sobre la hija y heredera política del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) es irremontable.
Entre tanto, ningún organismo de observación electoral internacional, entre ellos el de la Organización de Estados Americanos (OEA), ha detectado irregularidades.
Sin embargo, para los fujimoristas son muestra del “fraude” cosas como inconsistencias en las firmas de los miembros de las mesas, el hecho de no haber recibido ningún voto en algunas de ellas o que presidentes y vocales en algunos colegios hayan sido parientes.