La Contraloría General realizó el pasado viernes 24 de enero una serie de visitas de control inopinadas en el Hospital de Emergencias Grau y el Guillermo Almenara de EsSalud a fin de constatar in situ la labor del personal médico, calidad del equipamiento y medicamentos.
Dichas comisiones auditoras en los nosocomios se dieron para recopilar información vinculada a la asistencia y permanencia de los médicos en sus turnos programados, así como del estado de los equipos biomédicos y del sistema eléctrico a raíz de las quejas de nupcias recibidas por la ciudadanía.
En el Guillermo Almenara se detectó un retraso de hasta dos horas en la atención de pacientes en el área de nefrología; además que las instalaciones eléctricas están en malas condiciones y deben ser reparadas para evitar posibles accidentes.
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Mientras que en el Hospital Grau, se constató que no hay un botón de pánico, dispositivo fundamental para advertir y prevenir emergencias. Sumado a que el equipo de radiología está expuesto a la radiación porque el personal no tiene la indumentaria ni el equipo adecuado para protegerse.
Tras estas visitas sorpresivas en los centros de salud del Estado, se apunta a mejorar los servicios que brindan a los asegurados para satisfacer sus demandas y necesidades. Se comunicarán los resultados al titular de EsSalud para que tome conocimiento de las posibles situaciones de riesgo.
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