Jefe de proyectos en VALTX
La gestión de proyectos se trata de un enfoque que ayuda en la planificación, orientación y cumplimiento de los objetivos dentro de una organización. Se aplica a cualquier tipo de proyecto y es ampliamente utilizado para controlar complejos procesos de cualquier rubro o sector. Presenta objetivos definidos, procesos controlables y documentación clara.
Entre los objetivos de su implementación se encarga de gestionar el inicio y desarrollo del proyecto, apoyar en la administración y resolución de problemas y ser facilitador de las actividades durante su ejecución. En su aplicación, presenta las fases de concepción e iniciación del proyecto, definición y planificación, lanzamiento o ejecución, rendimiento y control, y cierre del proyecto.
La gestión del proyecto tradicional se ejecuta a través de una secuencia establecida (iniciación, planificación, ejecución, medición y cierre). Los requerimientos son fijos mientras que el tiempo y el presupuesto es variable. Por lo tanto, un problema que se encuentra con mayor frecuencia son los altos presupuestos y plazos para conseguir la meta.
De otro lado, la gestión de proyectos ágiles es un enfoque que se empezó a utilizar para el desarrollo de proyectos de software; sin embargo, se ha adaptado para cualquier proyecto en general. Se trata de un proceso interactivo donde tienen menor duración, menor tiempo en planificación, pero mayor énfasis en la priorización. El trabajo en equipo, la colaboración y la flexibilidad para responder a los cambios lo más pronto posible, son características principales de la gestión ágil.
En los proyectos ágiles se establecen prioridades flexibles, se empieza a entregar antes en forma de avances, costos y plazos conocidos, generándose transparencia y calidad en los procesos definidos.
En el enfoque tradicional se trabaja con metodología predictiva, orientado a procesos, rígido, proceso controlado, se concibe como un solo proyecto, poca interacción y comunicación con el cliente, entregables al finalizar el proyecto, documentación extensa y complicada, registra cierta resistencia a los cambios y generalmente se trabaja en grupos grandes.
A través del enfoque ágil, se desarrolla mediante metodología adaptativa, orientado a personas, flexible, preparados para los cambios, se concibe como un proyecto subdividido en varios proyectos más pequeños, constante interacción y comunicación con el cliente, entregas constantes durante el proyecto, mínima documentación, preparados para los cambios y en grupos pequeños.
Teniendo en cuenta la naturaleza dinámica de las empresas en donde se están produciendo cambios constantemente, seguir una metodología ágil será una buena opción a tener en cuenta.