El 2022, como señaló el BCR, cerró con una caída de alrededor del 13% respecto al 2021 en el sector pesquero. Ello se explica -en parte- porque pese a la buena salud de la biomasa de anchoveta, que bordea los 10 millones TM, se dejó de pescar 1 millón de TM en comparación al 2021. La razón: el inicio tardío de la segunda temporada de pesca. Como es evidente, eso tiene un impacto negativo en la producción de harina y aceite de pescado.