Las políticas coercitivas en la región de Sinkiang, en el extremo occidental de China, han llevado a una fuerte caída en las tasas de nacimientos de los uigures y otras minorías, lo que podría sumarse a la evidencia de genocidio, afirmó el Australian Strategic Policy Institute (ASPI) en un reporte que fue desmentido por el gobierno chino.
El reporte, que citó datos oficiales de China, dijo que ha habido una “caída precipitada y sin precedentes en las tasas de natalidad oficiales en Sinkiang desde el 2017”, cuando China inició una campaña para controlar las tasas de nacimiento en la región.
La tasa de natalidad de Sinkiang cayó a casi la mitad desde el 2017 a 2019, y los condados donde la población era predominantemente uigur o de otro grupo minoritario vieron bajas mucho más pronunciadas que otros condados, dijo en el reporte el instituto, que recibe financiamiento gubernamental.
China afirma que los cambios en las tasas de natalidad se relacionan a una mejorar política sanitaria y económica y rechaza firmemente las acusaciones de genocidio.
ASPI “inventa datos y distorsiona los hechos”, afirmó Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, durante una sesión informativa en Pekín.
La población uigur de Sinkiang creció más rápido que la población de etnia han entre el 2010 y 2018, y las políticas de control de natalidad en Sinkiang no se enfocan en un grupo étnico minoritario en particular, agregó la portavoz.
El análisis de ASPI se basa en datos del gobierno chino, incluidas cifras regionales de población publicadas en marzo.
“Nuestro análisis se basa en trabajos anteriores y proporciona pruebas convincentes de que las políticas del gobierno chino en Sinkiang pueden constituir un acto de genocidio”, dijo el grupo.
El informe de ASPI sostiene que las tasas de natalidad disminuyeron un promedio de 56.5% en los condados con una población indígena del 90% o más del 2017 al 2018, mucho más que en otras regiones de Sinkiang y China durante el mismo período.
Las multas, el internamiento o la amenaza de internamiento fueron algunos de los métodos utilizados por las autoridades para desalentar los nacimientos, agregó.