Los precios mundiales de productos alimentarios subieron en agosto tras dos meses consecutivos de bajada, empujados por el precio del azúcar, el trigo y los aceites vegetales, anunció el jueves la FAO.
El índice de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) de los precios de los alimentos aumentó un 3.1% con respecto a julio, situándose en 127.4 puntos, un 32.9% más que hace un año.
Este indicador, que mide la variación mensual de los precios internacionales de la canasta de productos alimentarios básicos, se está acercando a su nivel récord (137.6 puntos), registrado en el 2011.
El azúcar aumenta su precio un 9.6% en un mes “por el miedo a los daños provocados por las heladas en los cultivos de Brasil”, primer exportador mundial, afirmó la FAO en un comunicado. Una subida atenuada sobre todo por “las buenas perspectivas de producción en India y la Unión Europea”, añadió.
El precio de los aceites vegetales se incrementó un 6.7% en agosto con respecto al mes anterior, alcanzando “sus niveles históricos por el temor persistente a una producción por debajo de su potencial y las retenciones de reservas que por esta razón aplican en Malasia”, explicó la FAO.
El aceite de colza y el aceite de girasol también subieron.
Los cereales progresaron en general un 3.4% de su valor. En concreto, el trigo es un 8.8% más caro debido a unas menores perspectivas de cosecha en varios de los principales países exportadores.
Por el contrario, el precio del maíz bajó un 0.9% por la mejora de las previsiones de producción en Argentina, la UE y Ucrania, lo que reduce las malas perspectivas de producción en Brasil y Estados Unidos.
De forma general, los precios de la carne aumentaron ligeramente en agosto. La carne ovina y bovina se mantienen por la importante demanda china. La carne de ave subió por el aumento de la demanda de importación desde el este de Asia y Oriente Medio.
Sin embargo, la carne porcina desciende en este índice por una demanda menor en China y el poco dinamismo de la demanda europea.
Por último, también bajaron ligeramente los precios de los productos lácteos en agosto. “El descenso de las cotizaciones internacionales de leche en polvo (...) compensó de sobra el aumento del precio de la mantequilla y el queso”, apuntó la FAO.