Los responsables de política monetaria de la Reserva Federal probablemente mantendrán las tasas de interés sin cambios cuando se reúnan este mes, pero dejarán la puerta abierta a un alza en julio, tras un informe del Gobierno que mostró que el empleo aumentó en mayo, pero las ganancias salariales se enfriaron.
Los operadores ven ahora una posibilidad entre tres de que la Fed suba las tasas por undécima vez consecutiva en su reunión del 13 y 14 de junio, frente a una entre cuatro que había antes del informe del Departamento de Trabajo, que mostró que los empresarios añadieron 339,000 empleos en mayo, muy por encima de los 190,000 que esperaban los economistas.
Sin embargo, los ingresos promedios por hora aumentaron un 4.3% con respecto al año anterior, por debajo del 4.4% de abril, y la tasa de desempleo subió al 3.7% desde el 3.4%, señales ambas de que el mercado laboral podría estar perdiendo fuelle.
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“Se trata de un efecto de alivio, ¿es éste el mítico aterrizaje suave? Eso parece”, dijo Kim Forrest, de Bokeh Capital Partners. “Esta baja cifra de inflación salarial es una muy buena noticia para los que creemos que la Fed debería hacer una pausa”.
Aun así, los fuertes aumentos del empleo mantuvieron viva la expectativa en los mercados financieros para que la Fed eleve su tasa de referencia otro cuarto de punto, hasta el rango del 5.25%-5.5%, en julio.
Los operadores ven este resultado dos veces más probable que un mantenimiento, aunque hay muchos más datos de aquí a entonces que podrían inclinar las apuestas en uno u otro sentido.
Fuente: Reuters
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