La Reserva Federal (Fed) ha metido la quinta marcha para tratar de evitar que la economía de Estados Unidos sufra daños prolongados por la pandemia del coronavirus, anunciando un recorte de emergencia de las tasas de interés el 3 de marzo y aprobando nuevas medidas desde entonces con frecuencia casi semanal.
Entre dichas medidas están la reducción de los tipos a cero y la reactivación de las compras de activos a gran escala.
La Fed, posiblemente la institución financiera más poderosa del planeta, tiene más de US$ 5.3 billones de activos en cartera, una cifra equivalente a aproximadamente una cuarta parte de la producción económica anual de Estados Unidos antes de la crisis.
El volumen de activos en sus manos crecerá mucho más como consecuencia de los programas que ha puesto en marcha, aunque algunos se mantendrán en los llamados vehículos de propósito especial (SPV, por sus siglas en inglés), en lugar de ir a parar directamente al banco central.
A continuación, algunas de las medidas adoptadas por la Reserva Federal hasta el momento:
** Recortes de tasas
La Reserva Federal redujo el costo del dinero dos veces de manera urgente este mes, algo que no se había visto desde la crisis financiera del 2008.
El primer recorte, de medio punto porcentual, se aplicó el 3 de marzo, mientras que el segundo, de un punto entero, tuvo lugar el 15 de marzo, lo que hizo que el tipo de préstamos a un día de la Fed para los bancos volviera a ser de casi cero.
La medida apunta a mantener bajo el costo de los préstamos para los bancos -y por extensión a sus clientes- con el fin de asegurar que los prestatarios tengan un amplio acceso al crédito durante la crisis.
** Alivio cuantitativo (QE)
La Fed empleó por primera vez el alivio cuantitativa (QE, por sus siglas en inglés) en el 2008, durante la crisis financiera. La idea es que a través de la compra a gran escala de varios tipos de bonos —principalmente deuda pública y títulos garantizados por hipotecas— se contribuye a que los tipos de interés a largo plazo, entre ellos los de las hipotecas y los préstamos para automóviles, se mantengan bajos, a niveles asequibles para las compras de los consumidores y las empresas.
Cuando redujo los tipos a casi cero el 15 de marzo, la Fed reinició estas compras a gran escala y ahora lo ha hecho con un compromiso de duración indefinida.
** Ventana de descuento
En las últimas semanas, los bancos han tomado dinero prestado del mecanismo de crédito de la Fed —concebido como una herramienta de último recurso— al mayor ritmo desde el 2009, a instancias del propio banco central. La llamada "ventana de descuento" se usa raramente porque a los bancos les preocupa que la utilización conlleve su estigmatización como entidades débiles.
Sin embargo, los responsables monetarios han reducido el tipo de interés que se cobra por la financiación al 0.25% y han ampliado la duración de los préstamos ofrecidos de 1 a 90 días. Hasta el miércoles pasado, los bancos habían pedido prestado más de US$ 50,000 millones.
** Líneas temporales de canje de divisas entre bancos centrales
La Fed tiene acuerdos permanentes con otros cinco grandes bancos centrales extranjeros —el Banco de Canadá, el Banco Central Europeo, el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón y el Banco Nacional Suizo— que les permiten proporcionar dólares estadounidenses a sus instituciones financieras en momentos de tensión. La Fed ha aumentado la frecuencia de las operaciones, que ahora son diarias en lugar de semanales.
También ha ofrecido líneas temporales de canje o líneas "swap" a otros nueve países para facilitar el acceso a los dólares, que tienen una gran demanda debido a que los pasivos de muchos Estados y empresas extranjeras están denominados en la moneda estadounidense.
** Mecanismo de préstamos de valores respaldados por activos a plazo (TALF)
A través de un SPV, el programa TALF comprará paquetes de activos garantizados por préstamos para automóviles, tarjetas de crédito, préstamos para estudiantes, préstamos respaldados por la Administración de Pequeñas Empresas y otros tipos de crédito.
Su objetivo es asegurar de que los bancos y otros prestamistas, como las compañías de financiación de automóviles, tengan suficiente dinero en efectivo para seguir prestando a los consumidores y las empresas durante la crisis.
** Servicio de financiación de pagarés (CPFF)
La Fed reintrodujo el CPFF, una herramienta que utilizó durante la última crisis financiera, para hacer llegar el dinero directamente a las grandes empresas, que son importantes generadoras de empleo.
Al igual que el TALF, utilizará un SPV para hacer compras de pagarés, una fuente esencial de financiación a corto plazo para muchas empresas. El mercado se ha visto afectado por la preocupación de que las empresas afectadas por los esfuerzos para frenar la propagación del coronavirus no puedan devolver sus pagarés.
** Instrumento de créditos de agentes primarios (PDCF)
A través de este servicio, la Fed ofrece préstamos a corto plazo a las más de dos decenas de empresas de Wall Street autorizadas a realizar transacciones directamente con el banco central, los llamados "primary dealers" (operadores primarios).
El programa ofrece financiación de hasta 90 días a los operadores primarios. Un programa similar, que funcionó del 2008 al 2010, sólo ofrecía préstamos a 24 horas.
** Línea de crédito empresarial del mercado primario (PMCCF)
Con este programa, la Reserva Federal actuará como soporte para deuda corporativa emitida por empresas de alta calificación. A través de un SPV, el PMCCF comprará bonos en el mercado primario (es decir, en el momento de su emisión) y emitirá préstamos a empresas para que puedan cubrir los gastos de su negocio y mantenerse en funcionamiento.
La deuda debe ser devuelta al programa PMCCF en un plazo de cuatro años.
** Línea de crédito empresarial del mercado secundario (SMCCF)
Estrechamente relacionado con el PMCCF, este programa contempla que un SPV compre bonos de empresas y fondos negociados en bolsa en el mercado secundario, es decir, el mercado donde estos valores se negocian después de su primera emisión.
Esta liquidez de mercado introducida por la Reserva Federal tiene por objeto estabilizar las condiciones del mercado de deuda corporativa y facilitar a las empresas la obtención de fondos en él. Solo los llamados valores de grado de inversión son admisibles para su compra.
** Línea de liquidez de fondos mutuos del mercado monetario (MMFLF)
Este nuevo mecanismo está destinado a mantener en funcionamiento al sector de fondos del mercado monetario, que asciende a un valor de 3,8 billones de dólares en un momento en que los inversores están retirando dinero rápidamente.
La herramienta ofrece préstamos de hasta un año a instituciones financieras que presentan como garantía activos de alta calidad —entre ellos, títulos del Tesoro de Estados Unidos— que han comprado a fondos mutuos del mercado monetario.
La Fed alienta indirectamente a los bancos a comprar activos de fondos del mercado monetario, reduciendo las probabilidades de que los fondos necesiten vender esos activos con pérdidas para atender los reembolsos.