Alexis Leondis
Las criptomonedas han experimentado un repunte tras meses de descensos, lo que les da cierta credibilidad a quienes afirman que las monedas digitales son resistentes y están a punto de ser aceptadas de forma más generalizada.
Aunque es muy difícil predecir algo cuando se trata del bitcóin y otras divisas, cada vez hay más personas a las que se les paga, o quieren que se les pague, en criptomonedas, desde deportistas profesionales hasta empleados del sector tecnológico y otros. Argumentan para ello la facilidad y la transparencia de los pagos en monedas digitales, especialmente cuando los empleadores y los empleados no tienen su sede en el mismo país.
Pero hay que tener en cuenta algunas consideraciones importantes. Aparte de la volatilidad, un paso en falso podría tener como consecuencia no ser compensado correctamente o crear posibles problemas con el Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Los empleadores estadounidenses pueden resistirse a la compensación en criptomonedas al principio. Es mucho más trabajo para ellos a la hora de retener parte de los ingresos que se requieren para pagar los impuestos de Seguridad Social y Medicare. Si se paga a un empleado en monedas digitales, los empleadores tienen que lidiar con una contabilidad adicional y la conversión de parte de esos ingresos en dólares estadounidenses para pagar los impuestos federales.
Algunos pueden encontrar que los empleadores prefieren clasificarlos como trabajadores subcontratados en lugar de empleados para hacer que la carga de las retenciones recaiga en los empleados, que entonces serían considerados independientes.
En el caso de los trabajadores subcontratados, es imperativo que soliciten un formulario 1099, que es el que se utiliza en EE.UU. para declarar los ingresos de las empresas para las que trabajan. Deben pedir detalles que indiquen cuándo se recibieron unidades individuales de bitcóin o similares y el precio de cada una. Esto ayudará a los que reciben esta forma de compensación a calcular sus obligaciones fiscales con precisión.
Tenga en cuenta que los no empleados son responsables de pagar el impuesto sobre el trabajo por cuenta propia (un impuesto del 15,3% que se destina al Seguro Social y Medicare). Software como cryptotrader.tax y bitcoin.tax pueden ayudar a llevar el registro.
Los receptores deben pagar el impuesto sobre la renta ordinario por el valor justo de mercado de las monedas en el momento de recibirlas. También tendrán que pagar impuestos sobre las ganancias de capital cuando vendan o cambien las monedas por otras divisas digitales. Si lo hacen en el plazo de un año, estarán sujetos a las tasas impositivas sobre las ganancias de capital a corto plazo (que suelen ser las mismas que las tasas impositivas sobre la renta ordinaria) o, si es un plazo más largo, se enfrentarán a las tasas impositivas sobre las ganancias de capital a largo plazo (0%, 15% o 20%, dependiendo de su nivel impositivo).
Dado que los empleadores no retienen automáticamente los impuestos a los trabajadores subcontratados, generalmente se les aconseja a esos trabajadores que realicen pagos de impuestos estimados cada trimestre en lugar de enfrentar una gran factura cuando presenten sus declaraciones. Con las criptomonedas, puede ser difícil estimar lo que se debe, por lo que los trabajadores independientes deben considerar pagar el 100% (o el 110%, si ganan más de US$150,000) de lo que pagaron el año anterior. Hacerlo ayudará a evitar multas por pago insuficiente cuando se cuadren las cuentas al final del año fiscal.
Algunos devotos de las criptomonedas pueden mostrarse reacios a vender cualquier tenencia para realizar esos pagos estimados y preferirían enfrentar la multa por pago insuficiente. Esa podría ser una señal de alerta para que el IRS inicie una auditoría.
Es aconsejable acordar con el empleador con antelación cuándo se calcula el valor de la compensación en criptomoneda. ¿Es cuando termina un período de trabajo? ¿O cuando se debe pagar?
Dada la volatilidad del bitcóin y otras monedas, unos pocos días pueden marcar una gran diferencia en lo que se paga. También es útil ponerse de acuerdo sobre cómo compensar cosas como los días de vacaciones pagados, dice Nicole Green, directora de NGG Tax Group. Sea lo que sea, los trabajadores deben asegurarse de que se indique claramente y no solo a discreción del empleador.
Quienes trabajan para empresas centradas en las criptomonedas pueden recibir una compensación en forma de tokens privados que no se negocian tan fácilmente como el bitcóin, ethéreum o litecoin. Averiguar el valor justo de mercado de esos tokens puede ser complicado a la hora de calcular los impuestos que se deben pagar, pero los poseedores de tokens no deberían usar eso como un pase libre para ignorar las normas de declaración.
Además, esas monedas se pueden otorgar como compensación adicional que se devenga, similar a las opciones sobre acciones. Pero hay una distinción importante. Con las opciones sobre acciones, el receptor tiene la capacidad de reconocer parte de los ingresos antes de pagar menos impuestos en el futuro. Es probable que el IRS no permita que un poseedor de tokens privado haga la misma elección, según Matt Metras, agente registrado que trabaja con una docena de clientes que son compensados en criptomonedas.
El enfoque más inteligente para los interesados en recibir pagos en monedas digitales suele ser un híbrido, con algunas compensaciones en criptomonedas y otras en dólares. Para los más optimistas sobre el futuro de las monedas digitales, es mejor invertir en ellas directamente que jugar con su sueldo.