Este martes 28 de enero la Casa Blanca emitió un decreto firmado por Donald Trump en el que se pone fin al financiamiento las cirugías de transición de género en menores de edad en Estados Unidos.
Una de las consignas de Donald Trump para su segundo mandato presidencial es eliminar las operaciones de cambio de sexo en menores, sean químicas o quirúrgicas.
“En todo el país, los profesionales médicos mutilan y esterilizan a un número cada vez mayor de niños influenciables (...) esta peligrosa tendencia será una mancha en la historia de nuestra nación y debe terminar”, indicó el mandatario.
LEA TAMBIÉN: Precios del café se disparan por amenaza arancelaria de Trump
Este decreto se aplica a los ministerios y agencias federales, y establece que “Estados Unidos no financiará, apoyará, alentará ni ayudará a la supuesta transición de un niño de un sexo al otro”.
El presidente Trump advierte en el decreto que “aplicarán firmemente todas las leyes que prohíban o restrinjan esos procedimientos destructivos”. Es decir, se corta la inyección de recursos para los establecimientos de salud que realicen las operaciones o tratamientos químicos como la administración de bloqueadores de la pubertad.
Los programas como Medicaid (para las personas de bajos ingresos) y Medicare (para los mayores) y el sistema de seguro militar ya no atenderán estos procedimientos.
LEA TAMBIÉN: Perspectivas financieras 2025: inflación, tasas y retos globales
La medida de Donald Trump también establece que el Departamento de Justicia trabajará con el Congreso en un proyecto de ley que permita a los padres y niños afectados demandar a los profesionales de la salud que hayan realizado operaciones o prescrito tratamientos químicos.
Cabe añadir que en Estados Unidos hay aproximadamente 1,6 millones de personas que se identifican como transgénero, y de ese universo, más de 300,000 tienen entre 13 y 17 años. Un tercio de estas viven en estados que han prohibido los procedimientos para la transición de género, según el Instituto Williams (UCLA).