El gobierno del presidente Joe Biden anunció medidas para atender el daño a miles de familias que fueron separadas en la frontera entre México y Estados Unidos, intensificando los intentos de rápidamente revertir los implacables cambios a la política migratoria de los últimos cuatro años.
Biden planea aprobar órdenes relacionadas con la separación de familias, seguridad fronteriza e inmigración legal, lo que resulta en nueve medidas ejecutivas relacionadas con el tema durante sus primeras dos semanas en el puesto. Los detalles son escasos, pero las acciones tienen el objetivo de revertir muchas de las políticas del expresidente Donald Trump para desalentar la inmigración, tanto legal como ilegal.
Alejandro Mayorkas, cuya nominación como secretario de Seguridad Nacional está en espera de ser confirmada en el Senado, encabezar un equipo que abordará la separación de familias, enfocado en gran parte en reunificar a padres y menores que siguen separados.
No está claro cuántos, pero se ha identificado a casi 5,500 menores en documentos oficiales separados de sus padres durante la presidencia de Trump, incluidos unos 600 cuyos padres aún debe encontrar una comisión designada por el tribunal.
“El equipo informará de forma regular al presidente y recomendará pasos para prevenir que dichas tragedias vuelvan a ocurrir”, dijo el gobierno de Biden en un comunicado.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), que demandó para reunificar a las familias, ha solicitado al gobierno estatus legal en Estados Unidos para las familias que han sido separadas, así como compensación económica para estas y que el gobierno pague por abogados. El abogado de la ACLU, Lee Gelernt, dijo que se sentiría “extremadamente frustrado” si el equipo asignado se limita solo a encontrar a los padres de los 600 niños aún separados.
La revisión de la seguridad fronteriza incluye una ley que obliga a personas en busca de asilo a esperar sus audiencias en cortes migratorias de Estados Unidos en ciudades mexicanas fronterizas.
Es un paso hacia el cumplimiento de una promesa de campaña de poner fin a la política Permanecer en México, conocida oficialmente como Protocolos de Protección al Migrante, que registró a unas 70,000 personas en busca de asilo desde que entró en vigor en enero del 2019.
La Casa Blanca dijo que creará “un sistema de asilo humano” al rescindir o reconsiderar las políticas de Trump que causaron “caos, crueldad y confusión”. Advirtió que tomará tiempo, lo que podría provocar quejas por parte de algunos defensores de los inmigrantes.
“La situación en la frontera no se transformará durante la noche, en gran parte debido al daño causado en los últimos cuatro años”, indicó la Casa Blanca en un comunicado. “Pero el presidente está comprometido con una estrategia que mantenga a nuestro país seguro, fuerte y próspero, y que también se alinee a nuestros valores”.