Según el escenario de caso base de BNEF, se estima que el suministro global de cobre refinado aumentará un 16% entre el 2022 y 2040, alcanzando los 25 millones de toneladas. Esto está por debajo de la demanda prevista. Photographer: Bartek Sadowski/Bloomberg
Según el escenario de caso base de BNEF, se estima que el suministro global de cobre refinado aumentará un 16% entre el 2022 y 2040, alcanzando los 25 millones de toneladas. Esto está por debajo de la demanda prevista. Photographer: Bartek Sadowski/Bloomberg

Un informe de BloombergNEF titulado ‘Global Copper Outlook 2022-2040′ (Perspectiva mundial del cobre 2022-2040) revela que, en su mejor escenario de producción, donde las minas pueden entregar los proyectos anunciados a tiempo, aún podría haber una escasez de cobre de hasta 6 millones de toneladas.