En las estimaciones mundiales destaca la de Brasil, país que producirá de 67 millones a 90 millones de sacos, un cálculo que mantiene la previsión de junio y marca un crecimiento de 12.23% respecto a la campaña 2019-2020. (Foto: REUTERS/Jose Roberto Gomes)
En las estimaciones mundiales destaca la de Brasil, país que producirá de 67 millones a 90 millones de sacos, un cálculo que mantiene la previsión de junio y marca un crecimiento de 12.23% respecto a la campaña 2019-2020. (Foto: REUTERS/Jose Roberto Gomes)

La relativa a la campaña 2020-2021 alcanzará los 175.5 millones de sacos (de 60 kilos la unidad), lo que supone un repunte de 4% en comparación a la anterior, debido especialmente al incremento previsto en la cosecha de Brasil.

Así lo recoge el último informe sobre el mercado mundial del , elaborado por el Departamento Norteamericano de Agricultura (USDA), que no obstante, con datos a mes de diciembre, revisa a la baja su última previsión de junio, que situaba la cosecha en 176.1 millones de sacos.

Por variedades, el USDA eleva la cosecha mundial de la “arábica” hasta los 101.1 millones de sacos, algo más que en su avance de junio (101.80 millones), y confirma así un alza de 7% respecto a la campaña 2019-2020.

De la variedad “robusta”, se producirán 73.51 millones de sacos, volumen 1.04 % menor al estimado por el USDA en junio, pero un 0.43% mayor en comparación con la campaña anterior.

En las estimaciones mundiales destaca la de Brasil, país que producirá de 67 millones a 90 millones de sacos, un cálculo que mantiene la previsión de junio y marca un crecimiento de 12.23% respecto a la campaña 2019-2020.

Detrás aparece Vietnam, con una cosecha prevista de 29 millones de sacos, un recorte de 3.4 % en relación al avance de junio y de -7.3% respecto a la anterior.

En tercer y cuarto lugar figuran Colombia e Indonesia que, según el USDA, mantendrán su producción en 14.1 millones y 10.7 millones de sacos, respectivamente.

Para Etiopía, la previsión asciende a 7.5 millones de sacos, volumen ligeramente superior a los 7.45 millones de la campaña 2019-2020.

Respecto al comercio internacional, el informe apunta a una subida de 2% en las exportaciones mundiales de café, hasta 138.42 millones de sacos (135.21 millones en la campaña 2019-2020), reflejo sobre todo de un crecimiento en Brasil, Honduras y Colombia.

Por su parte, tras una revisión al alza en diciembre, el USDA prevé unas importaciones mundiales de 133.02 millones de sacos, 4.2% más que en la campaña 2019-2020, impulsadas por el tirón de la demanda en la Unión Europea (UE) y Estados Unidos.

Los importadores de la UE -el mayor consumidor de café a escala mundial- comprarán 49 millones de sacos, un 4 % más respecto a la campaña anterior, y los de Estados Unidos, 27.15 millones de sacos (47.15 millones en la campaña 2019-2020).

En el apartado del consumo, la demanda doméstica mundial ascenderá a 165.40 millones de sacos (166.28 millones en la estimación de junio), lo que aún supone un crecimiento cercano a 1.6% frente a los datos de la campaña anterior.

En cuanto a los excedentes finales de campaña, el USDA los cifra en 41.34 millones de sacos (36.65 millones en la campaña 2019-2020), 13% más y la cifra más alta de los últimos seis años.