El emporio textil de Gamarra, ubicado en La Victoria, está cerrado desde que inició la cuarentena, el pasado 16 de marzo. Sin embargo, si bien ya se ha anunciado el reinicio de actividades en el marco de la reactivación económica que ha diseñado el Gobierno, para este centro comercial su reinicio aún tiene puntos que aclarar.
La presidenta de la Coordinadora de Empresarios de Gamarra, Susana Saldaña, explica que este centro comercial, que alberga a 31,900 empresas, tiene una particularidad especial, pues además de tener un sinfín de realidades en cada una de ellas, está en medio de un entorno muy difícil, en donde los comerciantes ambulantes reinan todos los días, o por lo menos era así hasta antes de la pandemia del COVID-19.
En contexto, es importante mencionar que Gamarra se ubica entre las avenidas Aviación y 28 de Julio, y es en este cruce donde se ubica el mercado La Parada, uno de los problemas identificados, pues es aquí en donde trabajan los comerciantes ambulantes desde hace varios atrás.
Según refiere, cuando se decretó el estado de emergencia para contener el avance del coronavirus, el 100% de los microempresarios de Gamarra lo acataron, sin embargo, fuera de ello, la realidad era otra.
“Seguimos acatando (la cuarentena) con todas las consecuencias tan terribles que están trayendo para nosotros, económicamente hablando. Sin embargo, en la zona entre (las avenidas) Aviación y San Pablo, jamás cerraron, han vendido de todo hasta el día de hoy, hasta licores. Todo tipo de negocios y rubros que siempre estuvieron vendiendo y jamás cerraron. Entonces nosotros no entendemos porque ese trato diferenciado”, se cuestiona Saldaña.
Agrega que actualmente en la Avenida Huánuco –que bordea Gamarra- también se observa el comercio ambulatorio, por lo que dijo que aquí se destierra el hecho de que todos los comerciantes ambulatorios pertenecían a Gamarra. ¿De dónde salen los ambulantes si Gamarra está cerrada?, comenta Saldaña.
Agrega que desde el emporio comercial se vienen preparando para el reinicio de actividades a puerta cerrada e incluso afinan los detalles para el lanzamiento de una plataforma virtual con servicio delivery, sin embargo, indicó que se necesita una garantía de que en Gamarra no habrá más ambulantes, “ni uno más, nunca más”.
“Por años a nosotros nos han cargado con la responsabilidad y con las consecuencias que ha traído el comercio informal, las mafias, la venta de calles y las coimas. Los empresarios de Gamarra hemos tenido que cargar con las consecuencias y asumir incluso las terribles responsabilidades de ellos y nosotros creemos que eso ya se terminó”, dijo.
Problemática expuesta
Saldaña indica que esta preocupación ha sido dada a conocer al Ministerio de la Producción (Produce), cuando se presentó el protocolo sanitario para el reinicio de actividades de Gamarra, cuya primera etapa contempla a algunos proveedores y algunos talleres de confección; además del despacho de mercadería enviado a pedido.
Agregó que la responsabilidad de los comerciantes ambulantes recae en la Municipalidad de Lima y en Municipalidad de La Victoria, sustentado en el artículo 195 de la Constitución Política del Perú donde precisa que es deber de los Municipios distritales organizar, reglamentar y administrar los servicios públicos locales de su responsabilidad.
En ese marco, la Coordinadora de Empresarios de Gamarra envió el pasado 4 de mayo una misiva al alcalde de La Victoria, George Forsyth, para –también- dar a conocer esta situación que ocurre a los alrededores de Gamarra. Así, en el documento, al cual tuvo acceso Gestión.pe, se solicita al alcalde tomar acciones para el retiro de los comercio ambulatorio.
“Otra medida que su gestión debe implementar con premura y carácter de urgencia es asegurar que, de ahora en adelante, no existan visos de comercio informal en el perímetro de Gamarra y este se mantenga libre de ambulantes y jaladores. De esta forma resguardaremos la salud y la seguridad de todos los empresarios y trabajadores”, señala la misiva.
De igual manera, se solicita realizar pruebas de descarte de COVID-19 al personal que vaya a destinar para el cuidado, la limpieza de las calles, la seguridad ciudadana y la fiscalización; y además, cuenten con todos los elementos de protección personal respectivos.
Saldaña agregó que de nada servirá cumplir con los protocolos sanitarios si en la puerta del emporio de Gamarra existe “un carnaval” de riesgo de contagio, pues, como es conocido, los comerciantes ambulatorios no cuentan con ningún tipo de protección, impera la insalubridad.
El protocolo
Entre las medidas que se contempla en el protocolo sanitario para el reinicio de actividades de Gamarra, que será a puerta cerrada, figuran las siguientes:
- Distancia social obligatoria de un metro y medio entre las personas que trabajan
- Entradas y salidas al emporio por horario y de forma escalonada
- Uso de termómetros para medir la temperatura en todas las puertas de ingreso a Gamarra y en todas las galerías
- Uso obligatorio de mascarillas y otros implementos como los enterizos sobre la ropa
- Tapetes desinfectantes para zapatos en cada galería
- Para el caso de proveedores, además del uso de mascarillas y enterizos, se contempla el uso de caretas faciales y guantes, pues están más expuestos
- Apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional para la transitabilidad de los comerciantes. Estarán a cargo de la seguridad y el control de los ingresos y salidas de Gamarra, y también contará con termómetros para medir la temperatura.