Mineras importantes de cobre en Perú están recuperando progresivamente su producción tras el desbloqueo de una carretera, según muestran datos de energía revisados el viernes por Reuters, aunque permanece la incertidumbre frente al clima de protestas en el país.
El consumo de electricidad en Las Bambas de la china MMG Ltd y en Antapaccay de Glencore, cuyas faenas cayeron abruptamente a inicios de febrero, ha aumentado de forma intermitente y paulatina desde entonces mientras las protestas antigubernamentales parecen haber ingresado a una pausa.
Los datos, del ente privado del sector eléctrico peruano COES, brindan el indicador más rápido y detallado sobre la actividad minera de Perú, clave para comprender las perspectivas de suministro del metal, con precios globales ya elevados en alrededor de US$ 9,000 por tonelada.
Perú, el segundo mayor productor mundial de cobre, enfrenta protestas desde la destitución del expresidente Pedro Castillo el 7 de diciembre, incluyendo bloqueos de vías por las cuales las empresa mineras se abastecen de insumos para producir.
Aunque no hay detalles del impacto por la paralización de algunas minas por las protestas, el valor de toda la producción minera cayo 3.63% interanual en enero, la primera baja luego de tres meses de alzas consecutivas, según datos adelantados publicados esta semana por la agencia de estadística.
Los datos del COES no muestran si el transporte de concentrados de cobre para su exportación ha mejorado.
Las Bambas, que produce el 2% de cobre a nivel mundial y que comenzó a operar en el 2016, ha resistido a las constantes paralizaciones por protestas de comunidades vecinas que alegan y reclaman más beneficios por la explotación de los recursos.
Antapaccay, que en enero sufrió la quema de parte de su campamento tras un ataque de manifestantes, reabrió a fines de ese mes sus actividades tras una suspensión temporal y ha estado elevado producción de forma progresiva, dijo una fuente cercana a la compañía a inicios de esta semana.
Si bien el corredor minero han estado libre desde mediados de febrero, comunidades de la provincia de Chumbivilcas del Cusco, una de las zonas por donde atraviesa la vía, esperan reunirse en las próximas horas para decidir nuevas acciones.
“Por ahora está libre, pero tenemos una reunión esta noche (viernes) y vamos a ver qué medidas tomar; si mantenemos o se bloquea nuevamente la carretera, eso lo deciden las propias comunidades”, dijo a Reuters Carlos Quispe, uno de los dirigentes del frente de defensa la provincia de Chumbivilcas.
Los bloqueos de carreteras han disminuido desde más de un centenar en enero hasta 16 estos últimos días, casi todos en la región de Puno, según el supervisor de transporte local.
Los manifestantes en el corredor minero se han sumado a las protestas que demandan la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso, elecciones adelantadas y una asamblea para la redacción de una nueva Constitución.
Representantes de Las Bambas y Antapaccay no estuvieron disponibles de inmediato para comentarios sobre el tema.
La minería es clave para la economía de Perú porque sus ventas representan el 60% de sus exportaciones totales.
Fuente: Reuters