Boom inmobiliario: ¿Qué buscan las personas al comprar departamentos de estreno en Lima?
El desarrollo inmobiliario vacacional en Perú ha experimentado un crecimiento notable en los últimos años, impulsado por el aumento del turismo y el interés de los inversionistas en propiedades de segunda vivienda en zonas de alta demanda turística. Así, con un enfoque en ofrecer viviendas que combinan disfrute personal y rentabilidad a través de alquileres vacacionales, Fiduma busca consolidarse en este nicho. En conversación con Gestión, Juan Francisco Figuerola , director de la compañía, detalló los planes de expansión, los desafíos enfrentados en 2024 y las expectativas de recuperación para el próximo año.
En detalle, la compañía espera terminar el stock de unidades de su condominio ubicado en el Valle Sagrado en Cusco, pero, a la par, iniciará la construcción de su primer desarrollo inmobiliario dentro del valle del Cañón del Colca en Arequipa. Este proyecto está pensado como una alternativa para el turismo en la región sur del país, un destino que ha visto un aumento significativo en el flujo de visitantes en los últimos años. Según Figuerola, Arequipa es el segundo destino turístico más importante del Perú, y el Colca es una de las zonas con mayor crecimiento.
“Esperamos que el nuevo proyecto en la región no solo ofrezca opciones atractivas para los turistas, sino que también sea una inversión rentable para nuestros clientes. Este desarrollo incluirá bungalows diseñados para maximizar la experiencia del turista, con un enfoque en la sostenibilidad y el turismo de aventura”, detalla.
LEA TAMBIÉN: Arequipa: Perú Moda Deco y Alpaca Fiesta generarán negocios por US$ 85.5 millones
El proyecto del Valle del Colca incluirá bungalows de 60 m² en terrenos de entre 500 y 600 m² y busca atraer tanto a propietarios interesados en viviendas vacacionales como a inversionistas que busquen rentabilizar sus propiedades a través del turismo. Según Figuerola, el lanzamiento de la preventa está programado para julio de 2025, con el inicio de la construcción en el último trimestre del año.
“Esperamos completar el proyecto en diciembre de 2026, con una inversión de alrededor de US$ 4 millones, enfocándonos en un mercado mayormente compuesto por arequipeños. Además, tenemos planes de expansión en la selva peruana, con proyectos en Tarapoto y Chachapoyas. Aún estamos en negociaciones para adquirir terrenos en ambas localidades, pero el objetivo es captar el interés por el ecoturismo, aprovechando la riqueza natural de estas zonas”, precisó.
Por otro lado, Fiduma planea cerrar la venta de sus últimos lotes disponibles en el Valle Sagrado de los Incas, Cusco. “Aún nos quedan 13 unidades por vender en nuestro proyecto de Cusco, que hemos estimado culminar en los próximos dos años. La ubicación en el Valle Sagrado sigue siendo una de las más demandadas para segundas viviendas, no solo por el turismo, sino por la revalorización constante de la zona”, explicó Galindo.
Desafíos por superar
A pesar de los ambiciosos planes para 2025, Fiduma ha enfrentado un 2024 complicado debido a la inestabilidad económica y la baja confianza en el mercado peruano. “Este ha sido un año difícil. Hemos tenido que ajustar precios para mantenernos competitivos y aún contamos con un stock significativo en nuestro proyecto del norte, en Punta Sal. Sin embargo, hemos logrado las ventas necesarias para mantener nuestras operaciones en marcha”, reconoció Figuerola, quien espera que el próximo año traiga un panorama más favorable.
LEA TAMBIÉN: Inversiones de US$ 28 mlls por año hacia 2028: estos son los planes de Illusione
Además, una de las claves del modelo de negocio de Fiduma es ofrecer propiedades vacacionales que no solo brinden un espacio de recreación familiar, sino que también funcionen como inversiones a largo plazo. ”Nosotros pensamos en viviendas que están cerca de atractivos turísticos importantes, lo que permite a los propietarios rentabilizar sus inversiones a través de alquileres. Este tipo de inmuebles tiene un doble propósito: disfrute personal y generación de ingresos”, señaló Figuerola.
En cuanto a la recuperación del sector inmobiliario vacacional postpandemia, Fiduma ha experimentado una lenta pero constante mejora, aunque todavía no ha alcanzado los niveles previos a 2020. El vocero sostiene que todavía no han regresado a los niveles prepandemia. Por ejemplo, un bungalow de dos habitaciones en Cusco tiene hoy una rentabilidad anual de unos US$ 15,000, cuando antes de la pandemia esa cifra llegaba a US$ 20,000, explica. “El turismo está levantando, pero a un ritmo más lento de lo que esperábamos”, señaló.
Proyecciones para 2025
Para el 2025, Fiduma proyecta un crecimiento moderado, con el objetivo de vender aproximadamente el 20% anual de su nuevo proyecto en el Valle del Colca, que incluye bungalows y terrenos vacacionales. Además, con el lanzamiento de nuevos proyectos en 2025, Fiduma espera que la reactivación turística y la mejora del entorno económico impulsen la demanda.
“Para nosotros, un proyecto exitoso se debe vender en dos años. Con el Colca y Cusco, estamos enfocados en cumplir ese objetivo y ofrecer a nuestros clientes una inversión segura y rentable, además de una experiencia vacacional inigualable”, concluyó Figuerola.
Temas que te pueden interesar sobre desarrollo inmobiliario:
Construcción aún pesimista para contratar, ¿inmobiliarias podrían mejorar esto?
Albamar ‘edifica’ plan al 2025: pone la mirada en las periferias de Lima
El costo de mudarse en Perú: ¿cuánto mueve esta industria y qué tan formal es?
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.