Con sede en Pichanaki, la principal zona productora y exportadora de kion en el Perú, Agroexportaciones Llacta proyecta sembrar 35 hectáreas de jengibre y 5 hectáreas de cúrcuma orgánica, ya que la demanda mundial de productos orgánicos crece año tras año por la tendencia de una alimentación saludable y amigable con el medio ambiente. La campaña pasada (septiembre-noviembre), la empresa sembró 20 hectáreas de jengibre con la meta de exportar 40 contenedores este 2024, un 20% más que en 2023.
Además de sus mercados tradicionales en Europa, la empresa planea incursionar en Canadá y Marruecos, con la expectativa de aprovechar la creciente demanda global de productos orgánicos. Actualmente, exporta a países como Alemania, Rusia, Países Bajos y España, además de Estados Unidos, República Dominicana, Ecuador, Chile, Panamá y Colombia.
El kion peruano es apreciado por su calidad superior, especialmente en términos de sabor y aroma, características que lo diferencian de sus competidores de Ecuador y Brasil. Sin embargo, Manuel Llactarimay, gerente comercial y de operaciones, señala que una de las desventajas del jengibre peruano es su tamaño, ya que el cultivo orgánico limita el uso de fertilizantes químicos, lo que da lugar a raíces más pequeñas.
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“El mercado europeo es el más exigente en términos de normativas orgánicas. Todos nuestros productos pasan por estrictos controles de calidad para garantizar que cumplen con estas normativas”, afirma Llactarimay.
Desafíos y proyecciones
Uno de los mayores desafíos que enfrenta la producción de jengibre en Perú son las condiciones meteorológicas y las plagas, como la Erwinia y la Ralstonia, que han afectado significativamente los rendimientos. Este año, la producción ha disminuido debido a estas plagas, lo que ha incrementado los precios en un 40% en comparación con el año anterior (el precio de la caja de 30 libras puede oscilar entre US$ 30 y US$ 33). Sin embargo, la demanda sigue siendo fuerte, especialmente en mercados donde el jengibre peruano ha consolidado su presencia, como en las comunidades asiáticas en California.
“La demanda ha disminuido un 30% durante el verano, pero se espera que aumente nuevamente en otoño. Nuestro pico de exportaciones es en septiembre, octubre, noviembre y diciembre”, explica Llactarimay.
Además, destaca que Brasil, con su mayor producción y menores costos (precio FOB de US$ 20 por caja en el puerto de Los Ángeles, Estados Unidos), es un competidor fuerte, aunque el jengibre peruano mantiene su nicho por su sabor distintivo.
Agroexportaciones Llacta no se limita solo al kion. La empresa también exporta cúrcuma, achiote, cacao, cebolla, naranja y ajo, diversificando así sus productos y mercados. “Iniciamos exportaciones de cúrcuma a Holanda y España, y hemos visto un crecimiento significativo en estos mercados”, añade Llactarimay.
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