Durante los últimos años, el Perú se ha posicionado en el mercado internacional con productos de la canasta agroexportadora como los arándanos, las uvas, las paltas. En el 2022, las agroexportaciones llegaron a casi los US$ 10,000 millones, logrando un crecimiento de 12.12% versus el 2021, según ADEX. Solo esos tres productos juntos sumaron alrededor de US$3,000 millones, de acuerdo con Julio Pérez Alván, presidente de dicha institución.
Debido a las intensas lluvias originadas por el ciclón Yaku y por un posible fenómeno del Niño existe preocupación entre las agroexportadoras. “En Lambayeque se estiman más de 23 mil 800 hectáreas de cultivos afectados y 11,400 hectáreas de cultivos perdidos, sobre todo de arroz y banano”, asegura Pérez Alván.
Sin embargo, también genera preocupación la campaña de paltas y uvas. En esta zona, se encuentra la palta hass que, si bien no registra campos perdidos, tuvo retrasos en la cosecha, empaque y envío en aproximadamente 300 contenedores.
“Si bien no tenemos cifras cerradas sobre el impacto económico, obviamente hay una tremenda preocupación por el tema agroexportador”, sostiene Amanda Gallegos, presidente del Comité de Agroindustrias de ADEX. “Estamos todavía constatando los efectos del ciclón, no podemos decir que lo hemos superado, pero de hecho hay implicancias en el volumen de las cosechas y las salidas de los productos”, agrega Gallegos.
De acuerdo con la líder del comité, los agremiados en el norte, como en Virú, Trujillo, Piura, ente otras ciudades, están intentando rearmar los procesos y haciendo los esfuerzos para cumplir las obligaciones dentro de los márgenes con los países en destino.
“En los arándanos no hemos recibido mucha información (la campaña está casi terminando), pero en un producto emblemático como la palta sí hemos tenido información de que probablemente habrá alguna afectación”, explica.
De acuerdo con ADEX, para este año se proyectan que las agroexportaciones cerrarán en US$10,608 millones, lo que significaría un crecimiento de 7.4% respecto al 2022. No obstante, con el primer trimestre afectado por protestas y lluvias, ¿es viable llegar a esa cifra?
“Es una cifra muy retadora, pero es cierto que el nivel de diversificación de las agroexportaciones permite rápidamente pensar en el siguiente ciclo y rearmar los procesos. Tenemos nueve meses por gestionar, hay ciclos productivos que van en función a los mercados del exterior y eso permite tener recuperaciones con otro tipo de productos o hacia otro tipo de mercados”, detalla la titular de ADEX.
Granos andinos
En cuanto a la exportación de granos andinos, Gallegos apunta que hay un nivel de afectación muy puntual por lo sucedido en Puno. “Pero ya hace ocho o diez años solo Puno era, por ejemplo, productor de quinua. Hoy hay regiones como Huancayo, Huancavelica, Pasco y Arequipa que ya son productores y eso hace que el volumen que sacamos al mercado sea importante”, dice la ejecutiva, quien aclara que no por eso hay que descuidar Puno.
“Tienen una quinua de alta calidad y las familias que la trabajan tienen especialización en granos andinos”, precisa.