Ricardo Guerra Vásquez
Hay 17 proyectos próximos a licitar para las regiones de Áncash, Ica, Lambayeque, Lima, Piura y Tumbes que serán presentados en el roadshow “Proyectos de inversión para el cierre de brechas de infraestructura”, organizado por la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN) y el Equipo de Entrega del Reino Unido (UKDT por sus siglas en inglés).
En este contexto, Gestion conversó en exclusiva con James Redman, director del Programa UKDT, que brinda asesoramiento y asistencia técnica especializada a la ANIN.
- ¿Cuál es el trabajo de UKDT en Perú?
Somos un socio estratégico de la ANIN, encargada del programa de la reconstrucción en el norte del país. Traemos experiencia internacional a las áreas de PMO y también apoyo técnico a tres carteras: soluciones integrales, educación y salud.
- ¿Cuál es su estrategia?
Nos enfocamos en la durabilidad de las construcciones e interconectividad entre nuestros diseños para asegurarnos que los hospitales y las escuelas estén construidas de manera resiliente a eventos sísmicos, inundaciones y asegurarnos que la infraestructura esté trabajando y en concordancia con las poblaciones.
Trabajamos en amplia colaboración con las comunidades, además de la ANIN. En última instancia tratamos de asegurar un legado sostenible hacia el futuro. Esto se relaciona con nuestro programa de transferencia y conocimiento. No solamente asesoramos hoy, sino que pasamos capacidades al sector público peruano.
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- En cifras de inversión, ¿de cuánto estamos hablando?
El programa de la reconstrucción es la cartera más grande de proyectos que Perú nunca ha ejecutado bajo una sola entidad. Estamos ayudando al Gobierno peruano a ejecutar 140 proyectos en soluciones integrales, salud y educación con inversión de capital casi S/30 mil millones.
- Con lo visto estos años, ¿cómo está Perú en el camino al cierre de brechas de infraestructura?
Desde los Juegos Panamericanos, Perú se encuentra en una jornada de un camino de grandes inversiones de capital. Los eventos climáticos en los últimos años dejó una gran infraestructura dañada, pero también reveló la gran brecha de infraestructura. El programa de la reconstrucción tenía la idea de construir infraestructura mejor, más resiliente en los distintos sectores.
Pero, el programa de la reconstrucción en sí mismo no soluciona el problema. Es un vehículo que se estableció para atraer las mejores prácticas a estos esfuerzos, para centralizar los fondos del Gobierno bajo un solo PMO y asegurarse que se utilicen de manera efectiva.
Luego de la reconstrucción, habrá mucho más que hacer. Es un inicio fantástico para Perú en este cierre de brechas de infraestructura y a través del legado, que estamos dejando con la transferencia de conocimientos, esperamos que se comparta en el sector público.
- ¿Cuán importante son los acuerdos de Gobierno a Gobierno para acelerar este cierre de brechas?
Perú reconoció la necesidad de evolucionar en la ejecución de infraestructura porque estaba atrasada. Asociarse con socios internacionales es una buena forma de estimular el enfoque gubernamental en la ejecución infraestructura. El cambio es muy difícil, es mucho más difícil cuando la organización en la que uno está trabajando está descentralizada y tenemos múltiples entidades, múltiples ministerios para coordinar.
El programa reconstrucción es pionero porque trajo todo ese cambio bajo un solo techo y le permitió al equipo del Reino Unido traer las mejores prácticas internacionales al Perú. Creemos que con la transferencia de conocimiento, Perú va a poder investigar distintos mecanismos para la ejecución de infraestructura.
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- Participaron en la ejecución del proyecto Quebrada El León, en Trujillo, para proteger a casi 50 mil personas ante inundaciones. ¿Qué enseñanzas dejó esta experiencia?
La quebrada es un ejemplo sobre cómo la colaboración con las partes interesadas locales proporciona beneficios a la infraestructura. Realizamos trabajos con muchísimo cuidado donde habían restos culturales, desarrollando métodos muy sensibles de construcción.
Hoy están protegidas más de 8,000 comunidades de los alrededores de Trujillo con construcciones resilientes para eventos de inundación para los próximos 60 a 70 años. Hemos trabajado de la mano con ANIN para cerrar este proyecto, hacer el cierre comercial de manera puntual, sin disputas y con las cuentas finales acordadas.
Esto quiere decir que ANIN puede decir que han ejecutado el proyecto como una verdadera colaboración. Es muy importante que nosotros podamos cerrar estos proyectos del sector público, sin atrasos, sin arbitraje, sin conflictos.
- Entonces, ¿podemos hablar también de rentabilidad con este mecanismo?
Uno de los aspectos claves que trajimos con el equipo del Reino Unido es la rentabilidad a largo plazo, valor por dinero y los costos a lo largo de todo el ciclo del proyecto. Esto es un punto en la que el sector público necesitaba ayuda cuando recién llegamos.
Hemos venido ayudando a desarrollar esas conversaciones para asegurarnos que la rentabilidad del valor por dinero, que cada sol que se paga de impuestos, se gaste bien. Cuando los diseños de proyectos siguen las mejores prácticas internacionales para asegurar resultados resilientes y sostenibles, la infraestructura va a estar ahí por el resto de nuestras vidas.
La resiliencia es construir a un costo aceptable, pero con una visión a largo plazo. Esto es uno de los aspectos claves que ha traído el equipo del Reino Unido y me siento orgulloso de decir que el sector público peruano ahora también lo mantiene como una de sus propias habilidades.
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