La inflación ha crecido en las últimas semanas. (Foto: César Campos | GEC)
La inflación ha crecido en las últimas semanas. (Foto: César Campos | GEC)

El Banco Central de Reserva del Perú () moderó ayer su política expansiva y elevó la de la política monetaria de 0.25% a 0.50% ante la alta inflación transtitoria registrada en las últimas semanas. ¿Pero qué significa esta medida y qué impacto puede tener en las familias y empresas?

Una tarea del BCR es controlar la tasa de inflación; es decir, evitar que el precio de los bienes y servicios del país suban o bajen descontroladamente. La tasa de interés de referencia es una herramienta que emplea el ente emisor para cumplir este objetivo.

Para ello, se toman en cuenta dos indicadores: la inflación misma que reporta el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), y las expectativas de inflación, que es un estimado a futuro de la inflación por parte de los agentes económicos del país. La primera nos indica el alza en el precio de los productos en la canasta básica, mientras que la segunda advierte cuánto puede llegar a subir la variación de precios.

“Según el BCR, las expectativas de inflación para este año subieron a 3.03%. Cuando las expectativas de inflación suben y se desenganchan de la meta del ente emisor (entre 1% y 3% al año), el banco central debe subir su tasa de referencia”, explicó a este diario el economista Jorge González Izquierdo.

La decisión del BCR va a presionar a la baja las expectativas de inflación, por lo que en los próximos dos trimestres se podría comenzar a observarse un impacto en los precios de los productos.

“Básicamente está mandando un mensaje a los agentes económicos nacionales. Les dice ‘me estoy preocupando con la inflación y he subido un poquito’, y con eso las expectativas de inflación comienzan a bajar”, apuntó el docente de la Universidad del Pacífico.

Dólar y créditos

La tasa de interés de referencia también tiene un impacto en el tipo de cambio y en la facilidad para otorgar créditos por parte de las instituciones financieras. Una tasa más alta puede presionar a la baja el , pero encarece el costo del crédito en el corto plazo, especialmente para los clientes corporativos y de grandes empresas.

De acuerdo con González Izquierdo, la subida de la tasa a 0.50% es marginal, por lo que la política monetaria del BCR continúa siendo expansiva. Más que un efecto concreto en estos indicadores, busca reducir las expectativas de la inflación.

No obstante, un impacto en el precio del dólar o de los costos de los créditos podría observarse si el ente emisor decide imponer una política monetaria contractiva; es decir, continúa elevando su tasa de interés de referencia.

“El aumento en la tasa de interés a 0.50% es marginal. Si siguiera subiendo va a ayudar a que el precio del no siga subiendo tanto o bajar un poco”, apuntó el economista.

Explicó que continuar elevando la tasa va a provocar que capitales del extranjero vengan al país, buscando esta mayor tasa de rendimiento. Por ende, al incrementarse la oferta de dólares (que van a traer estos inversionistas) el tipo de cambio tendería a bajar.

En el caso de los créditos el efecto es similar. El aumento de la tasa a 0.50% no va a generar un incremento significativo en el costo de financiamiento, por lo que las empresas van a poder seguir prestándose dinero sin temor a una mayor tasa de interés.

Por último, González Izquierdo subrayó que todo este impacto esperado va a estar condicionado al escenario político que viva el país. “Si la incertidumbre no baja, y se mantiene igual o sube, estas medidas no van a ocasionar el efecto deseado”, puntualizó.