La tarjeta de crédito es uno de los productos financieros que tendrán que adecuarse a las tasas de interés máximas establecidas por el Banco Central de Reserva (BCR), en cumplimiento de la ley aprobada en el Congreso.
Uno de los efectos de esta medida será la restricción de operaciones como la disposición de efectivo y la compra en cuotas con las tarjetas de crédito, estimaron expertos del sector financiero.
De mayo a octubre, la máxima tasa de interés que podrán cobrar las entidades prestamistas por los nuevos créditos de consumo (de hasta S/ 8,800), incluido el financiamiento con tarjetas de crédito, será de 83.4% anual.
Superan tope
Si bien cada institución financiera segmenta a sus clientes y les asigna diferentes tasas de interés, los datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) muestran que lo que pagan algunos de ellos por el uso de sus plásticos supera el tope fijado. Así, de 14 entidades financieras que ofrecen compras en cuotas con tarjetas de crédito en siete la tasa efectiva anual (TEA) máxima es mayor a 83.4%.
Asimismo, el costo del financiamiento revolvente con los plásticos supera la tasa máxima en ocho de 14 entidades que lo permiten (ver tablas). El BCR dispuso que los topes a tasas rijan a partir del 10 de mayo para bancos, pero para las tarjetas de crédito revolventes aplicarán desde junio.
Golpe fuerte
En los cuatro bancos más grandes, la TEA máxima para disposición de efectivo con la tarjeta, el financiamiento más caro para las personas, se ubica entre 89.99% y 99.99%, según sus tarifarios. Incluso un banco especializado tiene la tasa más alta para esta operación (197.8%).
“Con esta medida el golpe será bastante fuerte para los clientes de menores ingresos, con préstamos más pequeños, para los que cuentan con menor información por ser informales y para la gente joven que recién entra al sistema financiero”, dijo una fuente del sistema financiero.
En el corto plazo, estos grupos serán excluidos del sistema financiero o sufrirán el recorte de sus líneas de compras o de disposición de efectivo con tarjetas, agregó.
Explicó que estos clientes suelen tener mayor riesgo, por lo que se les asigna tasas de interés más altas para compensar. Pero con los topes dejan de ser rentables para la banca, acotó.
En provincias
Walter Rojas, gerente central de negocios de Caja Cusco, consideró que el límite a las tasas de interés hará que la banca retail ya no sea tan agresiva en la colocación de tarjetas de créditos a nuevos clientes sobre todo en provincias. “Cuando llegaban a provincias colocaban su primera tarjeta a personas que tenían créditos en cajas o financieras, pero con tasas de interés altas, que superaban el 100%”, detalló.
La disposición de efectivo, que se puede retirar de cajeros automáticos, solo debe ser usada por los clientes en emergencias para tener un respiro cuando sufran una reducción de efectivo, sostuvo Juan Carlos Ramírez, experto en el sector financiero.
En cuotas
Estimó que en esta coyuntura habrá un mayor foco y más competencia de las entidades financieras por colocar préstamos en cuotas, con menores tasas de interés y que permiten a los deudores más orden en sus pagos, en momentos en que el mercado de tarjetas se está poniendo duro.
El tope a tasas de interés tendrá impacto en las carteras de tarjetas de crédito de los bancos, sobre todo de los especializados en consumo, pues mientras reevalúen sus políticas de riesgo van a estar cautos, sostuvo otro banquero. “Puede que por unos meses no haya crecimiento de la cartera, ni de líneas paralelas ni disposición de efectivo con tarjetas”, añadió.
A marzo, el saldo total de las tarjetas de crédito del sistema financiero se contrajo en 45.1% anual, según la SBS.