Entre los cientos de funciones y características que tienen los en la actualidad, lo primero que ve un potencial comprador es la marca.

Eso concluyó el informe HMD Global /Nokia Pain Points Consumers, que analizó el comportamiento de más de 2,000 consumidores en cinco países: Argentina, Chile, Colombia, México y Perú.

Es precisamente en nuestro país donde está uno de los porcentajes más altos: el 86% de peruanos aseguró que la confianza en el fabricante es indispensable a la hora de elegir. Asimismo, un 79% de los mismos encuestados afirmó que confía más en las marcas europeas al momento de hacer una compra de este tipo.

Otros hallazgos

Otra de las conclusiones que mostró el estudio es acerca de la obsolescencia programada. “Es cuando sabes que un producto tiene un tiempo de vida y vas a tener que reemplazarlo por otro nuevo”, simplifica el término Jorge González, director de para Centroamérica, Caribe y mercados emergentes de Latinoamérica.

Y es que si uno se fija en los productos insignia de las diferentes marcas presentes en el mercado, se dará cuenta de que todos los años lanzan un producto nuevo. Según González, el tiempo de “vida” de un móvil está entre los nueve y doce meses. En ese sentido, el 67% de usuarios peruanos tiene en cuenta este aspecto a la hora de adquirir un nuevo celular.

Una vez que el consumidor se decide por una marca, comienza el proceso de elegir qué características le convienen en cuanto a funcionamiento. Es así que el 47% de peruanos considera importante la duración de la batería. “A medida que se les agrega inteligencia artificial a los teléfonos, consumen más recursos no solo en batería, sino también en almacenamiento”, explica el ejecutivo de HMD Global.

La cantidad de fotos, videos y archivos que las personas acumulan en el celular hacen que, a la hora de la compra, sean motivo de preocupación también. El 45% de peruanos piensa en eso antes de invertir en un dispositivo.

Pantallas

De acuerdo al ejecutivo de HMD Global, una de las tendencias entre los fabricantes de teléfonos es aprovechar la totalidad de la pantalla dentro del aparato. “El lector de huellas ha pasado a la parte de atrás y la cámara frontal se usa como desbloqueador de cara”, indica.

De esa manera, se evita aumentar el tamaño de los productos. “Un teléfono grande se vuelve incómodo. No se puede tener en la mano cuando vas por la calle o en el trabajo”, señala.

“Obsolescencia programada es cuando sabes que un producto tiene un tiempo útil y vas a tener que reemplazarlo”.


Cifras

93%