Bollywood. (Foto: Difusión)
Bollywood. (Foto: Difusión)

Si la India es un país inabarcable por su complejidad de idiomas y culturas, el cine de este país de 1,350 millones de habitantes no podría ser diferente, aunque la primera imagen que acude a la mente sea la de los coloridos bailes de y sus historias de amor.

Se trata de una producción diversa que cuenta con cada vez más proyección internacional de la mano de los servicios de “streaming”, coinciden tanto críticos como la propia industria en el Día Internacional del Cine Indio que se celebró el último jueves 30, mientras que en el 2021 brillaron historias sobre los discriminados dalit o “intocables” poco exploradas por el cine de masas de Bollywood.

Explosión de contenido indio

La escritora Roopa Swaminathan hizo patente la expansión del cine indio en la escena internacional con en su libro “Bollywood Boom” en el 2017 y desde entonces, explicó, “la situación ha cambiado exponencialmente debido a Netflix y Amazon Prime, porque el ‘streaming’ se ha disparado en los últimos tres o cuatro años”.

No es solo que la población mundial tenga horas de contenido indio, desde las superproducciones del cine en hindi hasta series de producción propia, a un clic de distancia -suscripción mediante- en una época de confinamientos y salas cerradas a causa del coronavirus.

También influye que algunas compañías de “streaming” hayan apostado en los últimos años por la India, donde 1,986 largometrajes de producción nacional recibieron el visto bueno del órgano censor indio en el 2017 según el último reporte disponible, generando una ola de contenidos de calidad que por ahora han escapado a las estrictas reglas sobre el contenido del país.

“Las plataformas de ‘streaming’ no se andan con tonterías. En el cine indio puedes salirte con la tuya con ciertas fórmulas que a la gente en occidente probablemente les parecen algo ridículas, pero nosotros hemos nacido con ellas”, reconoció Swaminathan.

¿Qué tipo de fórmulas? La crítica de cine Shubhra Gupta avanzó a Efe un ejemplo: los romances “casi infantiles” con la creencia de que se puede tener a gente joven que se enamora “pero sin hacer el amor en pantalla”.

Espectro amplio

No es que las plataformas de “streaming” hayan venido a salvar el día en la India, un país que cuenta con una tradición cinematográfica de más de un siglo y donde se producen cientos de películas cada año en diferentes idiomas como el tamil, el telugu o el punyabí, entre otros.

Como en el resto del mundo, la industria cinematográfica india opera en diferentes registros, señaló Gupta.

“Por una parte, tenemos el cine popular de las grandes estrellas, en cada uno de estos idiomas. Y en el otro lado del espectro, tenemos películas con presupuestos menores pero de grandes ideales”, explicó.

Bollywood, un neologismo que fusiona Hollywood con la ciudad de Bombay, domina la imaginación de buena parte del mundo con éxitos de taquilla como “Dangal” (2016), “Secret Superstar” (2017) o el clásico “Disco Dancer” (1982).

Pero el historiador cinematográfico Sundararaj Theodore Baskaran, que como otros en la industria huye del término Bollywood y prefiere hablar de cine en función del idioma, indicó que la superestrella tamil Rajinikath es muy popular en Japón.

Cine comprometido

Baskaran apuntó además al auge de largometrajes de calidad en los últimos años del cine tamil, con “Jai Bhim” (2021) destronando por un tiempo a clásicos como “The Shawshank Redemption” (“Cadena Perpetua”) o “The Godfather” (“El Padrino”) en la lista de películas mejor votadas por los usuarios de la página especializada en cine y televisión IMDb.

Se trata de una película centrada en la represión contra los “dalit” o intocables, situados en el escalafón más bajo del sistema de castas hindú, y que han recibido poca atención en el cine de masas en hindi.

“El cine en hindi no es específico de una cultura, carece de un rostro, por lo que no trata de problemas sociopolíticos específicos”, manifestó Baskaran.

El historiador cinematográfico afirmó que “Jai Bhim” se enmarca en un movimiento de “cine dalit” que ha prosperado en el estado sureño de Tamil Nadu.

“Algunas películas como ‘Pariyerum Perumal’ (2018) obtuvieron un éxito comercial y de crítica, lo que marcó la llegada del cine dalit. Estos jóvenes directores dalit como Gopi Nainar han afrontado directamente el problema de la casta en sus películas”, dijo.

Sea cual sea el estilo, desde los saris vibrantes de Bollywood hasta el realismo del cine tamil o télugu, y pasando por clásicos como el aclamado cineasta bengalí Satyajit Ray, el cine indio está más al alcance de la mano que nunca.