Carlos Llanos, CEO de Sanitas Perú. (Foto: GEC)
Carlos Llanos, CEO de Sanitas Perú. (Foto: GEC)

Después de seis años de haber ingresado Sanitas al Perú, Carlos Llanos llegó a integrarse como CEO de la compañía. “Lo que vine a hacer fue tratar de tropicalizar lo que hace la organización a nivel mundial”, señala el colombiano, quien confiesa haberse adaptado con facilidad a la comida del país.

- ¿Cuál fue su primer trabajo?
Fue en la organización de Medellín (Colombia). Era asistente administrativo.

- ¿Qué aprendió de ese puesto?
Que siempre es importante empezar desde abajo. Saber lo que pasa en la parte inferior de la pirámide sirve para que, cuando estés arriba, puedas entender a los colaboradores y ayudarlos.

- ¿Tuvo un mentor en su camino?
Sí, hoy es el CEO de toda la organización. Fue mi jefe cuando empecé y ha sido mi ejemplo en este camino.

- ¿Qué cualidad cree que reconoció en usted?
Creo que coincidimos en muchas cosas. Somos muy apasionados, muy estructurados en los objetivos que nos trazamos y en la consecución de las respectivas estrategias.

- ¿Qué error ha cometido?
La impaciencia es una mala consejera. Por querer lograr resultados rápidos, muchas veces los directivos nos saltamos procesos. Con metodología y trabajo, se consigue lo mismo. No hay que apresurarse.

- ¿Ha sido impaciente?
No sabes cuántas veces. Además, he provocado eso en mis equipos. Desde cualquier punto de vista, es una condición que no se puede aceptar.

- ¿Usted se ha encargado de entrenar a un futuro líder?
Uno es fruto y reflejo de los jefes que ha tenido. La organización siempre trata de formar a los siguientes posibles líderes. Es una tarea complicada, pero es una responsabilidad nuestra.

- ¿Qué le gusta saber de un aspirante a colaborador?
La organización busca personas buenas, con valores, que sean competitivas y eficientes. Es en lo que hago más énfasis en las entrevistas.

- Si las personas se preparan para las entrevistas, ¿cómo pueden revelar si son realmente buenas?
Pregunta difícil que me haces. No soy experto en recursos humanos, las pocas entrevistas que hago son las del tren gerencial..

- ¿Entonces en qué se enfoca?
Me afinco en saber cómo se ve en el futuro. Trato de adivinar si las personas tienen ambición sana. Encuentro historias para conocer al candidato y luego hago preguntas mucho más particulares sobre la gestión.

- ¿Qué crítica lo ha remecido?
Recuerdo una que recibí de un subalterno. No había entregado un trabajo y se lo solicité subido de tono. El colaborador me dijo: “No he podido porque tengo a mi mamá en el hospital y usted no hace más que estresarme. Me pide cosas que yo no he podido hacer y no me pregunta por qué”.

- ¿Cómo reaccionó?
Me hizo reflexionar, pensar que debo tener empatía. Si no te entregan algo, hay que llegar hasta el fondo de las cosas.

- ¿Qué deben aprender los millennials de las generaciones anteriores?
Les recomendaría que sean más constantes. Los millennials, desde mi propio concepto, son personas que abandonan muy rápido. Siempre están en esa búsqueda incesante de cosas que no permite que tengan cierta estabilidad.

- ¿Cuál ha sido el peor consejo que ha recibido?
Los amigos no aconsejan, ellos ayudan. Alguna vez, un amigo me dio el consejo de tomar un atajo para conseguir algo. Uno los puede tomar, pero al final siempre salen mal. Es mejor tomar el camino largo, así uno se demore más.

en corto​

Colaboradores. La fuerza laboral de Sanitas Perú
está compuesta en un 70% por mujeres y en un 30% por hombres. Asimismo, casi el 50% del equipo es millennial. El CEO Carlos Llanos admira la libertad y pasión que demuestran, pero defiende que nadie nace con la experiencia para dar saltos rápidos.