Existen muchas personas a las que les gustaría ponerse algún tatuaje, pero no lo hacen por el hecho de que son permanentes, o porque le tienen miedo a las agujas. Si bien es cierto que los tatuajes permanentes se pueden quitar, es un proceso caro y trabajoso. Por ello, una alternativa muy curiosa es Prinker, la impresora de tatuajes temporales.
Según el portal Computer Hoy, lo interesante de este dispositivo es que los tatuajes temporales que imprime son bastante realistas y se aplican en unos segundos. Esto abre las puertas a nuevas posibilidades, incluso profesionales, más allá de la simple decoración corporal o moda.
El funcionamiento de Prinker es muy sencillo, tan solo hay que seleccionar el diseño que se quiere imprimir desde el teléfono. Se envía a la impresora portátil y luego se pasa sobre el lugar del cuerpo donde se desea colocar el tatuaje, casi como un escáner.
Este aparato utiliza una tinta especial no tóxica fabricada a partir de ingredientes cosméticos certificados. Es resistente al agua y aguanta hasta tres días, aunque se remueve con agua y jabón cuando se quiera.
Se puede usar un número ilimitado de colores, y la impresión es prácticamente instantánea. Como una impresora de papel parte de tres colores primarios (amarillo, cian y magenta) y la mezcla correcta es la que produce miles de colores.
Se pueden descargar miles de diseños ya disponibles o creados por los usuarios, pues existe una app para crear tatuajes personalizados.
Su precio no es barato, cuesta 500 € (US$ 552.5) en su página web. Por eso Prinker no solo se vende, sino que también se puede alquilar por un día, o para ciertos eventos.