La Ciudad de los Reyes ha coronado un nuevo máximo en su índice delictivo. Según el más reciente estudio de seguridad ciudadana del instituto Integración, el 80% de la población del Perú siente que el nivel de delitos ha aumentado en el último año.
El principal delito que sufrieron los peruanos son los clásicos robos al paso (61%), seguido de los robos a domicilio (16%), hurto en transporte público (12%) y robo de vehículos (8%).
Llama la atención la falta de confianza de los ciudadanos para acusar los delitos de los que fueron víctima. Del total de hogares víctima de algún tipo de crimen, el 46% ha sentado una denuncia. En el 2013, apenas eran 34%.
¿Es una percepción?Paradójicamente, en todas las regiones del país, la percepción de inseguridad ha disminuido. En Lima, por ejemplo, hacia 2013 solo el 2% de limeños se sentía seguro; hoy la cifra asciende al 8%. En la selva, el incremento fue de 9% a 19% en dos años. Mientras que en la costa sur (Ica, Arequipa y Tacna), un 11% de ciudadanos se sienten seguros, a comparación del 3% de 2013.
Parte del susto de la población está justificada en el modus operandi de los criminales en las calles. En el 49% de casos se utilizó un arma para concluir el hecho delictivo. Y el 21% de ocasiones fue un arma de fuego.
Esta inestabilidad en la tranquilidad de los peruanos los lleva a considerar opciones radicales para luchar contra la delincuencia. Desde patrullas militares en las calles (73%) hasta linchamientos públicos a los ladrones (72%).
¿Por qué tanto odio?Para los peruanos, las autoridades son las principales culpables de la inseguridad. Un 64% de ciudadanos reclamó que el mal desempeño de estos funcionarios (desde jueces hasta policías) es el causante de que los malhechores operen libremente en las calles.
Ahora, si analizamos este "mal desempeño" encontramos que el 29% de los peruanos acusa a los políticos, policías y jueces de corruptos. Mientras que un 24% decidió que ellos "no hacen nada".
Pero la ineficiencia de autoridades no es la única razón que exponen los peruanos para explicar la inseguridad ciudadana. El 11% demandó más policías en las calles y un mayor salario para los gendarmes; es decir, un incremento de presupuesto en el sector.
Los otros motivos se dividen en la falta de educación y valores (6%), la situación económica (4%), y la falta de organización del pueblo mismo (4%).