Escribe: Jose Deustua, director de UTEC Ventures
El 2023 representó un año desafiante para las startups en medio de altas tasas de interés y una desaceleración económica que alejó a los inversionistas del mercado de capital de riesgo. Esta situación dificultó tanto la obtención de inversión para las startups como para la creación de nuevos fondos de venture capital. De acuerdo con un artículo reciente de PitchBook, más de un tercio de los fondos de capital de riesgo dejaron de invertir en rondas de financiamiento para startups durante este año.
No obstante, el presente panorama del ecosistema peruano sugiere un 2024 más prometedor para las startups. A continuación, algunas de las señales alentadoras para el ecosistema peruano de startups:
· Se están gestando nuevos fondos de venture capital peruanos, donde al menos tres están en proceso de creación y levantamiento de capital. Aunque tomará tiempo hasta que alcancen sus metas, sin duda revitalizarán el mercado, generando mayor dinamismo, aunque inicialmente con inversiones modestas. Estos tres nuevos fondos duplicarán la cantidad actual de fondos de venture capital peruanos.
· Proinnovate seleccionó recientemente a tres fondos en su concurso para impulsar el Capital de Riesgo en Emprendimientos Dinámicos y de Alto Impacto, otorgándoles financiamiento para cubrir sus costos operativos durante 48 meses. Este financiamiento contribuirá a garantizar la sostenibilidad de estos fondos mientras avanzan hacia el cierre de su capital y continúan impactando en el ecosistema.
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· El Fondo de Capital para Emprendimientos Innovadores seleccionó dos nuevos fondos extranjeros para recibir recursos gubernamentales destinados a invertir en startups peruanas. El próximo año se espera mayor actividad en rondas lideradas por startups peruanas con la adición de estos dos fondos al fondo Salkantay, elegido en el 2022 por el FCEI y activamente involucrado en la inversión en startups peruanas.
· Las redes de ángeles inversionistas han experimentado una reactivación. A pesar que la inestabilidad política prácticamente detuvo la inversión ángel en Perú, este año ha habido un repunte en la actividad gracias, entre otros, a dos redes respaldadas por el programa gubernamental de Proinnovate. Se espera que el apoyo continuado de Proinnovate siga estimulando este tipo de inversión el próximo año.
· Está en proceso de creación un nuevo fondo de venture capital corporativo. Se espera que este fondo, originado en uno de los principales grupos económicos del país, tenga un efecto positivo en el ecosistema y posiblemente inspire a otros grupos a seguir su ejemplo.
· Durante el 2023 se registraron nuevas adquisiciones de startups peruanas por parte de grupos empresariales. Aunque el venture capital corporativo aún tiene limitaciones en Perú, este año evidenció un aumento en el número de transacciones y en la integración de estas empresas al ecosistema. Un ejemplo notable fue la creciente participación de corporaciones en las actividades de la Asociación Peruana de Venture Capital (PECAP).
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· Durante este año, se creó el Consejo Nacional Asesor de Inversión de Impacto en Perú (NAB Perú), vinculado a la red del Global Steering Group for Impact Investment (GSG), con el propósito de impulsar acciones estratégicas para fortalecer la inversión de impacto en el país. Se espera que iniciativas como esta amplíen la inversión de impacto, actualmente muy limitada en Perú.
· Para finalizar, se espera que la reciente formación de la Red Universitaria de Innovación (RUI), respaldada por la agencia de cooperación coreana, en adición al financiamiento que recibirán las incubadoras regionales ganadoras de los concursos de Proinnovate, tengan un impacto notable en la consolidación de ecosistemas fuera de Lima.
En resumen, si bien el 2023 fue desafiante, el 2024 se perfila como un buen año para las startups peruanas. Con un aumento en el número de fondos, un impulso en la inversión en etapas iniciales y un enfoque más amplio en la innovación en regiones y de impacto, se perfilan señales alentadoras. Estos indicios marcan un camino prometedor hacia la consolidación y el crecimiento continuo del ecosistema emprendedor en el país. Invito a todos los involucrados, tanto del sector público como del privado, a seguir participando activamente para mantener este rumbo positivo.