Un elegante superyate valuado en US$ 156 millones, propiedad de un oligarca y parlamentario ruso, se encuentra ahora en un puerto en Dubái, la señal más reciente de que el reino se ha convertido en un refugio para el dinero ruso y la guerra de Rusia en Ucrania.
El Madame Gu — de 98 metros, dotado de helipuerto, gimnasio, club de playa y ascensor — estaba atracado en el puerto Rashid de Dubái el jueves, poniendo a prueba la estrecha relación entre Estados Unidos y Emiratos Árabes Unidos (EAU).
El espectacular buque de casco azul pertenece a Andrei Skoch, uno de los miembros más ricos de la Duma. Magnate del acero, su patrimonio está valuado en US$ 6,600 millones, según Forbes. Los intentos de contactar a Skoch para pedirle declaraciones fueron en vano.
Tal como el yate A del multimillonario ruso sancionado Andrey Melnichenko, atracado en el emirato norteño de Ras al-Khaimah, la presencia del Madame Gu en Dubái demuestra cómo los oligarcas rusos han estacionado sus bienes en los EAU.
Los gobiernos occidentales han multiplicado sus sanciones, y Estados Unidos presiona a su aliado en el Golfo Pérsico a que adopte la misma política.
El Tesoro estadounidense sancionó a Skoch por primera vez en el 2018 por su papel en el gobierno y sus presuntas “relaciones de larga data con grupos criminales organizados rusos, incluso haber dirigido durante algún tiempo una empresa de ese tipo”. Semanas atrás, el Tesoro prohibió a entidades estadounidenses tener negocios con el Madame Gu y su helicóptero. La Unión Europea (UE) también ha sancionado a Skoch.
El Madame Gu, registrado en las islas Caimán, enarbolaba una bandera emiratí cuando los periodistas de Associated Press fueron a observarlo. Es una muestra de riqueza capaz de rivalizar con el famoso crucero convertido en hotel flotante Queen Elizabeth 2 de Dubái, atracado junto a él. También se encontraba junto al megayate de US$ 200 millones Dubái, propiedad del gobernante de la ciudad-Estado, jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum.
Fotos satelitales de Planet Labs PBC muestran al Madame Gu en su muelle del puerto Rashid a partir del 25 de marzo.
EAU, que incluye el lujoso destino Dubái y Abu Dabi con su riqueza petrolera, se ha negado a tomar partido en la guerra de Moscú y ha acogido de buen grado del dinero ruso en sus fincas frente al mar y hoteles de lujo. El ministerio del Exterior emiratí no respondió de inmediato a un pedido de declaraciones.
Ante la invasión de Ucrania, los empresarios y políticos más ricos de Rusia corrieron a salvar sus cuantiosos bienes de lo que se ha convertido en una rastra creciente. Los superyates de los oligarcas han adquirido una importancia enorme en la represión occidental, cuyo objetivo es presionar al presidente Vladimir Putin para que cambie de rumbo en Ucrania.