El contrato para la celebración de los Juegos Olímpicos solo especifica que la justa deportiva debe realizarse durante el 2020, explicó el martes la ministra japonesa para la cita olímpica.
La respuesta de Seiko Hashimoto a una pregunta en la cámara alta del parlamento implica que los Juegos podrían realizarse más tarde en el año y no tendrían que empezar el 24 de julio como está previsto.
Los Juegos Olímpicos de Tokio se están viendo amenazados por un virus de rápida propagación que ha causado 12 muertos en el país, provocando el cierre de escuelas, así como la cancelación de la mayoría de competiciones deportivas y eventos olímpicos en el país. Los Paraolímpicos se ponen en marcha el 25 de agosto.
El nuevo coronavirus, que empezó a propagarse en China, se ha detectado en al menos 70 países con 90,000 casos y 3,100 víctimas mortales.
“El COI tiene derecho a cancelar los Juegos si no se celebran durante el 2020”, dijo Hashimoto al parlamento. “Esto puede ser interpretado como que los Juegos pueden demorarse siempre y cuando se celebren dentro de este año natural”.
Sin embargo, la sugerencia de un posible cambio de planes fue descartada de inmediato en una reunión de la junta ejecutiva del Comité Olímpico Internacional en Suiza.
Tranquilidad en el COI
“Vamos a tener los Juegos el 24 de julio”, dijo el portavoz del COI Mark Adams a la prensa.
Tanto el presidente del COI como los organizadores de Tokio 2020 han dicho reiteradamente que esperan que los Juegos comiencen en la fecha prevista. Otros han sugerido que la propagación del coronavirus podría obligar a cancelar, demorar o trasladar eventos deportivos a otras ciudades.
A primera hora, el COI difundió un comunicado en el que expresó su “compromiso pleno al éxito de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, entre el 24 de julio y el 9 de agosto del 2020”.
Acto seguido, en algo inusual para el primero de los días de la reunión en Lausana, Bach compareció ante los medios para dar una declaración.
“Quisiera alentar a todos los deportistas a que prosigan con su preparación para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 con gran confianza y a todo vapor”, dijo Bach.
Bach también elogió la formación de un panel el mes pasado que incluye a la Organización Mundial de la Salud, las autoridades de Japón y el movimiento olímpico en Tokio y Lausana.
En una entrevista la semana pasada con medios japoneses, Bach declinó “avivar las llamas de la especulación de ninguna manera” ante versiones de una cancelación o posposición.
Preguntada por si creía que los JJ.OO. deberían celebrarse si el brote de coronavirus es peor para entonces que ahora, Hashimoto dijo: “Estamos haciendo todo lo posible para no tener que enfrentar esta situación”.
Cualquier tipo de ajuste en la programación de los Juegos impactará a las cadenas internacionales de televisión, que tendrán peso en un cambio.
El COI recauda el 73% de sus ingresos de US$ 5,700 millones en un ciclo olímpico por la venta de los derechos de transmisión. Casi la mitad del ingreso televisivo corresponde al canal estadounidense NBC.
Los Juegos Olímpicos de Tokio 1964 se realizaron en octubre. Pero la cita se pautó para el verano, dado a que es el único periodo abierto para el deporte. El otoño en Norteamérica está copado con la NFL, el béisbol de Grandes Ligas y la NBA, entre otras ligas profesionales, además del fútbol americano universitario. Europa, por su parte, enfoca su atención en las ligas de fútbol en Inglaterra, España, Alemania, Francia e Italia, sin mencionar los lugares donde el cricket y el rugby son populares.
Dick Pound, un exvicepresidente del COI, dijo a The Associated Press la semana pasada que una decisión sobre los Juegos se deberá tomar en los próximos meses. Kevan Gosper, otro exvicepresidente del COI y actual miembro honorario, señaló que una cancelación es posible.
Los Juegos Olímpicos han sido cancelados en tres oportunidades, todas por la guerra.