Activistas climáticos arrojaron este viernes pintura naranja al árbol de Navidad instalado por la firma de moda de lujo Gucci en la céntrica Galería Vittorio Emmanuele de Milán (norte) como protesta por la “complicidad de las multinacionales” en la degradación del medio ambiente.
Los activistas, pertenecientes según medios locales al grupo ‘Última generación’, se encaramaron a la plataforma sobre la que se sitúa este árbol formado por paquetes en forma de regalo y lanzaron pintura “lavable”, antes de que se los llevara la policía, informaron medios locales.
Con este gesto, los miembros de esta organización denunciaron “la complicidad de las multinacionales del lujo” que permiten “a una pequeña parte de la población acumular riquezas vergonzosas y abusar salvajemente de los recursos planetarios”, dijeron estos medios.
LEA TAMBIÉN: Un derrame de hidrocarburos afecta una playa en el norte de Venezuela, según activistas
Además, pidieron la creación de un “fondo de distribución para los daños de desastres climáticos” para “reparar los daños sufridos por Milán y otras ciudades”.
En Italia, miembros de estos colectivos han llevado a cabo recientemente otras acciones de denuncia, como el lanzamiento de barro a la basílica de San Marcos de Venecia (norte) el pasado 7 de diciembre, o una acción que acabó con ríos y canales de Roma, Milán y Venecia teñidos de verde fluorescente.