Las ganancias en las cuentas bancarias de los dueños deportivos no serían afectadas por la inflación.
“Estaría bastante tranquilo como dueño”, comentó Tim Clarke, analista en jefe de PitchBook, que investiga los mercados financieros privados. “Así es como la gente ve los activos de la industria del deporte profesional. Simplemente no bajarán”.
Cabe resaltar que la inflación presentó una elevación no vista en cuatro décadas, provocando la paralización de la economía y costos altos en los precios.
En el ámbito deportivo, los aficionados tendrían que pagar un costo más caro para visitar a su club favorito, las familias para competir en las ligas infantiles y juveniles, entre otros.
Pese a ello, los dueños de los clubes deportivos no sentirán el costo de las operaciones del negocio o de realizar alguna inversión, pues la presencia de franquicias deportivas sirven para el depósito de dinero.
“Sí pienso que hay cierta cobertura”, expresó Rob Tillis, director general de Inner Circle Sports, quien se ha dedicado en la venta de decenas de equipos en los cuatro deportes profesionales principales de EE.UU. “He estado haciendo esto por 30 años. Hemos pasado por muchos ciclos de negocios y las valuaciones han sido robustas. No veo que eso sea diferente ahora”.
En la gran mayoría de dueños presentan una capitalización estable para no afectar el presupuesto de sus clubes y de sus negocios externos.
Así, aunque los intereses elevados hayan enfriado el mercado inmobiliario, ello difícilmente afectará a los Cavaliers de Cleveland y al dueño de Rocket Mortgage, Dan Gilbert, quien tiene una fortuna neta de casi US$ 52,000 millones y es el vigésimotercer hombre más rico del mundo, según la revista Forbes.
No obstante, las pérdidas en la inversión piramidal de Bernard Madoff vapulearon la nómina de los Mets de Nueva York. El dueño Fred Wilpon vendió primero una parte del equipo y luego se deshizo de la totalidad.
“Estos tipos tienen tanto dinero que pienso que si comienzan a perder en otros lugares, será como un error de redondeo para sus clubes”, dijo Tom Pitts, jefe europeo de LionRock Capital, una firma de valores que tiene una participación de un tercio en el Inter de Milán. “La mayoría de estos tipos no se ha presionado para comprar el club. Es un pasatiempos caro”.
Las crecientes tasas de interés podrían volver más cara para los dueños potenciales la compra de un club si tienen que pedir prestado para pagar el nuevo precio.
“Simplemente cuesta mucho más dinero en términos absolutos de dólares el pago de la deuda”, explicó Pitts.
Un puñado de equipos prominentes está en el mercado.
Dan Snyder, dueño de los Commanders de Washington, enfrenta presiones para vender el equipo, luego que una investigación reveló una cultura corporativa tóxica. Snyder dice que contemplaría la venta de la totalidad o parte de la otrora orgullosa franquicia de la NFL.
Se espera que el precio de venta sea incluso superior al de US$ 4,650 millones de dólares desembolsado por Rob Walton, heredero de Walmart, para hacerse de los Broncos de Denver a mediados de este año.
Con una fortuna neta estimada en US$ 61,000 millones, Walton es la persona más rica del mundo.
Robert Sarver ha puesto en el mercado a sus equipos, los Suns de Phoenix en la NBA y el Mercury de la misma ciudad en la WNBA, luego que una investigación encontró evidencias de actitudes inapropiadas en materia racial y sexual en el lugar de trabajo.
En el béisbol, los Nacionales de Washington están a la venta, y la familia que posee los Orioles de Baltimore ha generado versiones sobre una venta. En el hockey sobre hielo, los Senators de Ottawa estarían disponibles para el mejor postor.
Dos de los clubes más prestigiosos del fútbol inglés, el Manchester United y el Liverpool, están también en el mercado. Forbes valuó en septiembre a los “Diablos Rojos” en US$ 4,600 millones, superando levemente al Liverpool.
Se espera que ambos eclipsen la cifra de US$ 3,200 millones desembolsada en la adquisición del Chelsea. Por un breve periodo, ésa fue la mayor cifra pagada jamás por un club deportivo.
Menos de dos semanas después, se anunció el acuerdo por los Broncos.
“Uno tiene a gente como los Walton y ve que todo esto es como una gota en un balde”, dio Clark. “Es un club. Ellos dicen algo así como: ‘¿Dónde está el siguiente Picasso a la venta?’... El sector de valor no tiene que ver con la economía. Siempre hay demanda y siempre hay abasto escaso”.
(Con información de AP)