Las autoridades de Fiyi incautaron un yate de US$ 300 millones que pertenecería al oligarca ruso Suleiman Kerimov, a petición del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El departamento informó solicitó la retención de la embarcación por violar las sanciones vinculadas a la guerra en Ucrania y por sus presuntos vínculos con la corrupción.
El “Amadea”, una embarcación de cinco años y 106 metros, estaba atracado en Lautoka (Fiyi), en el Pacífico Sur, cuando las autoridades locales se hicieron con su control en virtud de una orden judicial estadounidense y una petición del Departamento de Justicia.
“El Amadea está sujeto a confiscación en base a la causa probable de violaciones de la ley estadounidense, incluyendo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional, el lavado de dinero y la conspiración”, informó el departamento en un comunicado.
Kerimov integra un grupo de oligarcas rusos “que se benefician del gobierno ruso a través de la corrupción y su actividad maligna en todo el mundo, incluida la ocupación de Crimea”, dijo el departamento.
Estados Unidos ha impuesto sanciones a oligarcas rusos cercanos al presidente Vladimir Putin como parte de una serie de castigos económicos por la invasión de Ucrania.
Kerimov, que ha hecho una fortuna como copropietario de importantes empresas financieras y de energía rusas, entre ellas Gazprom y Sberbank, es también funcionario del gobierno ruso y miembro del Consejo de la Federación Rusa, indicó.
“No hay escondite para los activos de los criminales que posibilitan el régimen ruso”, señaló el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, en un comunicado.
“El Departamento de Justicia será implacable en nuestros esfuerzos para que rindan cuentas los que facilitan la muerte y la destrucción que estamos presenciando en Ucrania”, comentó.