Las carteras de deuda y acciones de los mercados emergentes registraron salidas de inversores extranjeros por segundo mes consecutivo en abril, mostraron este martes datos del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por su sigla en inglés), que se suman a las salidas récord de China en el primer trimestre.
Las carteras registraron una salida neta de US$ 4,000 millones el mes pasado, frente a las salidas de US$ 7,800 millones en marzo y las entradas de US$ 39,800 millones en abril del 2021.
En China se produjeron salidas netas de US$ 1,000 millones, mientras que la deuda registró salidas de US$ 2,100 millones y la renta variable entradas de US$ 1,000 millones.
“Una combinación de confinamientos por el COVID, la depreciación y el riesgo percibido de invertir en países cuyas relaciones con Occidente son complicadas pueden ser los principales impulsores de las recientes salidas de capital de China”, dijo Jonathan Fortun, economista del IIF, en un comunicado.
BlackRock afirmó el lunes que recortó su exposición a las acciones chinas y a los bonos del gobierno citando los lazos de China con Rusia, que han “creado una nueva preocupación geopolítica que requiere más compensación por mantener activos chinos”.
En términos más generales, JPMorgan aseguró que el crecimiento económico en los mercados emergentes se desacelerará “bruscamente” este trimestre, lastrado por China, Rusia y la propagación de unas condiciones monetarias más estrictas.
Los mercados emergentes, excluyendo a China, registraron salidas netas de US$ 2,900 millones, con US$ 10,500 millones que salieron de la renta variable, la mayor cantidad desde marzo del 2020, y US$ 7,600 millones que fluyeron hacia la deuda, la mayor parte de los cuales fueron a bonos en moneda local, según el IIF.
A nivel regional, los países emergentes de Europa registraron una entrada neta de US$ 2,800 millones, mientras que todos los demás registraron salidas.