Los 27 jefes de Estado y gobierno de la Unión Europea (UE) no lograron un acuerdo el 26 de marzo en una cumbre por videoconferencia, que reveló las profundas divisiones entre los países del bloque.
Los 27 jefes de Estado y gobierno de la Unión Europea (UE) no lograron un acuerdo el 26 de marzo en una cumbre por videoconferencia, que reveló las profundas divisiones entre los países del bloque.

El presidente del Eurogrupo, Mario Centeno, afirmó que “se activará y abrirá a todos los países” una línea de crédito de hasta 240,000 millones de euros" a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), en una entrevista con varios periódicos europeos.

Esta cifra equivale al 2% del PBI de la zona euro y es también el límite que podrían alcanzar los préstamos por país en función de su PBI.

“No tendría sentido vincular una a un programa de privatizaciones o a una reforma del mercado laboral”, dijo Centeno, en una entrevista publicada este sábado en varios periódicos, entre estos el francés Le Figaro y el español El País, antes de una reunión el martes por videoconferencia de los ministros de Finanzas.

El MEDE se creó en el 2012 durante la crisis de la deuda de la para ayudar a los Estados con problemas de financiamiento en los mercados. En teoría, los beneficiarios deben aplicar reformas, a veces dolorosas, como en el caso de Grecia.

"Habrá alguna forma de condicionamiento. Pero el MEDE está dispuesto a desvincular sus líneas de crédito de la lógica de la crisis de la deuda soberana", afirmó Centeno, ministro portugués de Finanzas.

"La idea es evitar toda estigmatización de los países", dijo, llamando también a tomar en cuenta "este sufrimiento económico y social que no cesa de aumentar".

Los ministros de los 19 países de la zona euro (el Eurogrupo) intentarán el martes, durante una reunión a la que también están invitados los países de la UE que no adoptaron el euro como moneda única, ponerse de acuerdo sobre propuestas económicas comunes frente a la pandemia.

Los 27 jefes de Estado y gobierno de la (UE) no lograron un acuerdo el 26 de marzo en una cumbre por videoconferencia, que reveló las profundas divisiones entre los países del bloque.