El Gobierno español rechazó hoy negociaciones con Caracas para la salida del dirigente antichavista y excandidato presidencial Edmundo González Urrutia, exiliado desde este domingo en Madrid, e insistió en reclamar a Nicolás Maduro la publicación de las actas electorales.
González Urrutia, que según fuentes del Ejecutivo será recibido en los próximos días por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, fue candidato en las elecciones de julio pasado y abandonó Caracas perseguido por la Justicia tras denunciar fraude en la victoria que el oficialismo adjudica a Maduro.
El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, avanzó este lunes que González recibirá asilo en España, solicitado por el propio opositor, y aseguró que España no ha aceptado “ninguna exigencia ni ha habido ninguna negociación” con el Gobierno venezolano para facilitar su salida del país.
También la ministra de Defensa, Margarita Robles, negó hoy “categóricamente” cualquier tipo de negociación y se refirió a “cuestiones puramente técnicas” para las autorizaciones de vuelo del avión de la Fuerza Aérea española que llevó el domingo a Madrid al dirigente opositor venezolano.
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“Lo que el Gobierno de Venezuela está haciendo con González y con muchísimos otros opositores es inaceptable, inasumible, todo tipo de persecución, de limitación de los derechos fundamentales. Como no podía ser de otra manera, España ha accedido a darle el asilo político”, denunció Robles.
La ministra insistió en que la acogida de González Urrutia no significa un cambio de posición de España.
“Que no haya ninguna duda de que el Gobierno de España no ha reconocido al Gobierno de Maduro y eso es lo que hay que poner sobre la mesa y hay que tenerlo en cuenta: Pedimos las actas y vamos a actuar siempre dando todo tipo de protección y cobijo a los ciudadanos venezolanos que están sufriendo una persecución”, dijo.
González Urrutia, un opositor venezolano más en España
Edmundo González se ha sumado a la lista de políticos de su país que se encuentran en España, y en la que figuran, entre otros, Leopoldo López o Antonio Ledezma.
Leopoldo López llegó a Madrid en 2022, tras abandonar la residencia del embajador español en Caracas, donde permanecía como huésped desde el 30 de abril de 2019, después de participar en un fallido levantamiento militar junto al entonces presidente del Parlamento venezolano, Juan Guaidó.
También en Madrid reside Antonio Ledezma, antiguo alcalde de Caracas, que estuvo recluido en una prisión y posteriormente en su domicilio acusado de conspiración por el gobierno de Nicolás Maduro.
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En España además vive el expresidente del parlamento venezolano Julio Borges, Premio Sajarov 2017, que participó como portavoz en el proceso de negociación entre el Gobierno y la oposición.
En conjunto, más de 390,000 venezolanos residen en España y la cifra aumenta con una media de 241 llegadas al día.
En 2024 (hasta el 31 de agosto) han pedido protección internacional en España 42,000 venezolanos; con un 37.5% de las peticiones, es la nacionalidad que más solicitudes de este tipo registra, según datos del Ministerio de Interior.
La inmensa mayoría acaba con un permiso de residencia temporal por “razones humanitarias”, una figura que el Gobierno otorga al menos desde 2019 a los venezolanos que no encajan en el estatus de refugiado o asilado.
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