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Hong Kong ha tenido una turbulenta historia desde su retrocesión a China el 1º de julio de 1997 tras 156 años de dominio británico.
Retrocesión
El 30 de junio de 1997 a medianoche Hong Kong fue retrocedido a China.
La “ley fundamental”, una suerte de mini-Constitución, garantiza al territorio un estatuto particular que le permite conservar ciertas especificidades (libertad de prensa, libertad de expresión, justicia independiente y liberalismo económico).
La ciudad está al mando de un jefe del ejecutivo, elegido por un colegio de grandes electores que en su mayoría responde a Pekín. Un Consejo Legislativo, del cual una minoría de diputados son elegido de manera democrática, debate y vota las leyes.
Crisis financiera y sanitaria
Poco después de la retrocesión, la crisis financiera asiática sacudió a Hong Kong, hundiendo al territorio hasta allí floreciente en una fuerte desaceleración económica.
El marasmo se acentúa a finales del 2002 con la aparición del virus del SRAS (síndrome respiratorio agudo grave). La epidemia deja 229 muertos en Hong Kong y 1,800 en el mundo, devastando a las economías asiáticas.
Ayuda de China
Pekín adopta una serie de medidas tendientes a impulsar la economía hongkonesa con la firma, a finales del 2003, de un acuerdo para levantar de manera progresiva las barreras arancelarias para los productos del territorio exportados a China.
Se flexibilizan las restricciones de viaje a Hong Kong para los chinos, lo que aumenta el número de turistas.
Fracaso de una ley antisubversión
El 1º de julio del 2003, medio millón de los siete millones de hongkoneses manifiestan contra un proyecto de ley antisubversión reclamado por China y a favor de más democracia. Los manifestantes ven en el texto una amenaza para sus libertades.
El proyecto de ley no se concreta.
Rechazo de China a elección directa
El 1º de enero del 2004, 100,000 manifestantes reclaman la elección directa del ejecutivo a partir del 2007 y del legislativo a partir del 2008.
La mini-Constitución de Hong Kong prevé la posibilidad de la elección directa del jefe del ejecutivo y del Parlamento, pero sin calendario.
En abril, las autoridades centrales se oponen a estas demandas, al menos para las fechas exigidas.
El 1º de julio, cientos de miles de manifestantes exigen nuevamente más democracia.
Sufragio universal prometido para el 2017
A fines del 2007, China establece finalmente para el 2017 las primeras elecciones democráticas de jefe del ejecutivo y para el 2020 las del Consejo Legislativo, provocando la ira de los movimientos prodemocracia que reclamaban el sufragio universal a partir del 2012.
“Movimiento de los paraguas”
En septiembre del 2014 comienza el “movimiento de los paraguas”. Manifestantes prodemocracia ocupan de manera pacífica el centro financiero y político de la ciudad para reclamar la instauración de un verdadero sufragio universal para la elección de sus dirigentes.
A pesar de la repercusión internacional que provocó este “movimiento” que duró 79 días, China no cedió un ápice. Sin embargo, estas protestas marcan el nacimiento de un frente que reclama la autonomía, e incluso la independencia, de Hong Kong.
Manifestaciones gigantescas
A partir de junio del 2019, la excolonia es escenario de un movimiento de protesta sin precedentes, con manifestaciones monstruosas y violentos enfrentamientos entre radicales y policías.
Nacidas del rechazo de un proyecto de ley que debía autorizar las extracciones hacia China continental, abandonado en septiembre, las protestas se transforman en un movimiento que denuncia la injerencia de China y reclama reformas democráticas.
COVID-19
En enero del 2020, Hong Kong es uno de los primeros territorios afectados por la epidemia de coronavirus.
El ejecutivo toma medidas drásticas, ente ellas la prohibición de reunirse en público, lo que provoca el final de las manifestaciones prodemocracia.
Ley sobre la seguridad nacional
El 30 de junio del 2020, China impone una nueva ley drástica sobre la seguridad nacional sin ni siquiera someterla al parlamento local.
El texto busca sancionar “la subversión, la secesión, el terrorismo y la colusión con las fuerzas extranjeras”, delitos que pueden ser condenados con prisión de por vida. Otorga a los agentes de seguridad chinos la posibilidad de operar en territorio hongkonés.
Desde entonces, la mayoría de las figuras del movimiento prodemocracia están en prisión, abandonaron la política o huyeron al extranjero.
Muchas potencias occidentales estiman que esta ley pone fin al principio “un país, dos sistemas” que había marcado la retrocesión y debía garantizar al territorio una muy amplia autonomía hasta el 2047.
Reforma del sistema electoral
En marzo del 2021, China aprueba una reforma radical del sistema electoral hongkonés que marginaliza por completo a la oposición.
El 8 de mayo del 2022, el exjefe de la seguridad de Hong Kong, John Lee, que había supervisado la represión del movimiento prodemocracia del 2019, es designado al frente a la ciudad.
