Banqueros de la Reserva Federal reiteraron su enfoque restrictivo y dijeron que no se detendrán en el ajuste de la política monetaria hasta que la inflación esté bajo control.
El presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, y la jefa de la Fed de San Francisco, Mary Daly, destacaron el compromiso del banco central de llevar la inflación de regreso a su objetivo del 2% y la necesidad de una clara evidencia de alivio de las presiones sobre los precios.
“Vamos a tener que hacer lo que sea necesario”, dijo Williams el viernes durante una entrevista en Bloomberg Television con Kathleen Hays.
Refiriéndose al pronóstico del banco central de que las tasas alcanzarán un máximo de 5% el próximo año, dijo que el nivel “podría ser más alto de lo que hemos señalado” si eso es lo que se necesita para reducir la inflación.
Los banqueros de la Fed elevaron las tasas de interés en medio punto porcentual el miércoles, llevando su tasa de referencia a un rango objetivo del 4.25% al 4.5%. También publicaron pronósticos que muestran que las tasas terminarán el próximo año en 5.1%, según la proyección mediana, y que no habrá recortes de tasas antes del 2024.
“Para mí, la pregunta de cuán alto tenemos que llegar realmente dependerá de lo que veamos en la inflación y el desequilibrio entre la oferta y la demanda”, dijo y restó importancia a las previsiones de algunos observadores de la Fed de que las tasas podrían necesitar llegar al 6% o incluso al 7%.
“Esa definitivamente no es mi línea de base”, dijo Williams. “Creo que tenemos algunos avances favorables en marcha, cosas de las que hemos estado hablando durante mucho tiempo”, agregó, citando el mejoramiento de las cadenas de suministro y la reducción de los precios de los bienes y las importaciones.
“Donde la inflación sigue siendo alta es en las áreas centrales de servicios, áreas que probablemente serán más persistentes y realmente reflejarán el desequilibrio entre la oferta y la demanda”, indicó. “Definitivamente necesitamos ver que están bajando hacia esa meta de inflación del 2%.
Pese a que la Fed desacelero el ritmo de las alzas de tasas esta semana, el presidente del banco central, Jerome Powell, dejó en claro que se avecinan más aumentos y dijo el miércoles que todavía queda “camino por recorrer” antes de que las tasas estén en un nivel que sea lo suficientemente restrictivo para controlar la inflación, que triplica su meta del 2%.
Aun así, los inversionistas apuestan a que la Fed solo elevará las tasas a un máximo de alrededor del 4.85% en 2023 y que rápidamente revertirá el rumbo para reducirlas en 50 puntos básicos para fines de ese año.
La jefa de la Fed de San Francisco, Daly, dijo que parece que los mercados están fijando precios para la “perfección”, mientras que ella quiere pruebas de que las presiones sobre los precios están disminuyendo.
“No sé muy bien por qué los mercados son tan optimistas sobre la inflación”, dijo durante una discusión virtual organizada por el American Enterprise Institute.
El último pronóstico de la Fed muestra que sus 19 miembros proyectan tasas que terminan en el 2023 en un rango de 4.9% a 5.6%, y 17 de ellos estiman que lo harán en 5.1% o más.