
Los funcionarios de la Reserva Federal realizaron un tercer recorte consecutivo de tasas de interés y mantuvieron su previsión de solo una reducción en 2026.
El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) decidió el miércoles por 9 votos contra 3 reducir la tasa de fondos federales a un rango de 3.5%-3.75%. También modificó sutilmente la redacción de su comunicado, sugiriendo mayor incertidumbre sobre cuándo podría volver a recortar las tasas.
En su rueda de prensa después de la reunión, el presidente Jerome Powell sugirió que la Fed ya había hecho lo suficiente para contener la amenaza al empleo mientras mantenía las tasas lo suficientemente altas como para seguir presionando a la baja los precios.
“Esta nueva normalización de nuestra postura de política debería ayudar a estabilizar el mercado laboral, al tiempo que permite que la inflación retome su tendencia descendente hacia 2% una vez que se hayan disipado los efectos de los aranceles”, señaló.
Cuando se le preguntó si estaba descartado que el próximo movimiento de la Fed fuera un recorte, Powell evitó confirmarlo, pero añadió que no veía un aumento de tasas como el escenario base de ningún funcionario.

Los votos disidentes y las proyecciones de tasas ponen de manifiesto las divisiones entre las autoridades monetarias que han surgido sobre si la debilidad del mercado laboral o la inflación persistente representan el mayor riesgo para la economía estadounidense.
En su comunicado de octubre, el FOMC describió qué tendría en cuenta “al considerar ajustes adicionales” a su tasa de referencia. En el comunicado del miércoles, el comité volvió al lenguaje utilizado el pasado diciembre —justo antes de una pausa en los recortes— para decir “al considerar la magnitud y el momento de ajustes adicionales”.
El resultado fue la primera vez desde 2019 que tres funcionarios votaron en contra de una decisión de política, con disidencias en ambos extremos del espectro. El S&P 500 subió mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro y el dólar cayeron. No se observaron cambios significativos en las expectativas del mercado para recortes de tasas en 2026.
Dos presidentes regionales de la Fed —Austan Goolsbee (Chicago) y Jeff Schmid (Kansas City)— votaron en contra de la decisión y se inclinaron por mantener sin cambios las tasas. El gobernador Stephen Miran, nombrado por Trump en septiembre para integrar la junta del banco central, volvió a disentir y se mostró partidario de una reducción mayor, de medio punto.
Los funcionarios de la Fed también autorizaron nuevas compras de bonos del Tesoro de corto plazo para mantener una oferta “amplia” de reservas bancarias.
La decisión de bajar las tasas llega después de que las divisiones dentro del comité salieran a la luz pública en las últimas semanas. Tras el recorte de octubre, varios funcionarios advirtieron sobre una inflación persistente, señalando su reticencia a apoyar otra reducción. Otros se mantuvieron enfocados en un debilitamiento del mercado laboral, pidiendo al menos un recorte adicional.
Los datos contradictorios ayudan a explicar por qué no ha habido un voto unánime en el FOMC desde junio.
El desempleo subió a 4.4% en septiembre, desde 4.1% en junio. Pero los precios —medidos por el indicador de inflación preferido por la Fed— aumentaron 2.8% en los 12 meses hasta septiembre, aún significativamente por encima del objetivo de 2% del banco central.
El cierre del gobierno ha complicado aún más las perspectivas de política al retrasar la publicación de datos clave.
A pesar de las divisiones en el comité y la incertidumbre económica, los inversores esperaban un recorte el miércoles luego de que el presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, considerado cercano a Powell, señalara su apoyo a una reducción en diciembre en un discurso el 21 de noviembre.
Nuevas previsiones
En sus nuevos pronósticos económicos, las medianas de las proyecciones de los funcionarios apuntaron a un recorte en 2026 y otro en 2027. Sin embargo, las perspectivas de tasas permanecieron profundamente divididas. Siete funcionarios indicaron que preferían mantener las tasas sin cambios durante todo 2026, mientras que ocho señalaron apoyo para al menos dos recortes.
Los funcionarios mejoraron su proyección mediana de crecimiento para 2026 a 2.3% desde el 1.8% estimado en septiembre. También previeron que la inflación bajará a 2.4% el próximo año, desde 2.6% proyectado en septiembre.
La decisión de política también llega poco después de que el presidente Donald Trump dijera que ya decidió a quién nominará para suceder a Powell como presidente de la Fed en mayo e indicó que anunciará la decisión a comienzos del próximo año. La Casa Blanca ha realizado críticas contra el banco central por no bajar las tasas más rápido, alimentando temores de que la independencia de la institución esté en riesgo.
Los funcionarios de la Fed aprobaron las nuevas compras de bonos del Tesoro a partir del 12 de diciembre. El movimiento era anticipado por muchos bancos de Wall Street como una forma de apuntalar la liquidez en los mercados de financiación a un día.
Desde 2022 y hasta este mes, el banco central había estado reduciendo el tamaño de sus tenencias de bonos del Tesoro, con el objetivo de alcanzar el tamaño más pequeño posible sin alterar los mercados monetarios.







