La demanda asiática de petróleo estadounidense está aumentando a medida que la crisis energética eleva los precios de otros crudos que se cotizan contra el contrato global de futuros del Brent.
China y otros compradores asiáticos han estado comprando superpetroleros de crudos ácidos estadounidenses para entrega en noviembre y buscan más para diciembre, según operadores. La mayoría de los compradores buscan calidades estadounidenses que han caído recientemente a los niveles más bajos en más de un año, con un incentivo adicional después de que el Gobierno de China concediera millones de toneladas de cuotas de importación de petróleo.
Un amplio diferencial entre los futuros del petróleo Brent y el West Texas Intermediate permitiría aumentar las exportaciones de crudo estadounidense, dijo Elisabeth Murphy, analista de upstream de ESAI Energy LLC para Norteamérica. El WTI se ha estado cotizando al menos US$3 por barril por debajo del Brent desde agosto, un descuento que generalmente favorece las exportaciones de crudo estadounidense.
El mayor apetito de Asia por el crudo estadounidense se produce después de una recuperación generalizada de la actividad de transporte de combustible y de mercancías, y en vísperas de un invierno en el que es probable que aumente la demanda de petróleo del sector energético. Esto también se produce en un contexto de déficit de oferta mundial de combustibles fósiles que está impulsando el aumento de los precios.
El viernes, el crudo Brent superó los US$85 por barril tras meses de recortes de producción por parte de la OPEP y sus aliados en respuesta a la pandemia. El ministro de Energía de Arabia Saudita, el príncipe Abdulaziz bin Salman, reiteró esta semana la necesidad de que la OPEP y sus aliados adopten un enfoque gradual y escalonado para restaurar la producción.
Murphy, de ESAI, prevé una demanda adicional de crudo de alrededor de 700,000 barriles diarios en Europa y Asia combinados este invierno, debido al cambio de gas natural a petróleo. Con la ayuda de un amplio descuento del WTI con respecto al Brent, las exportaciones de crudo estadounidense deberían alcanzar este mes entre 3.1 y 3.2 millones de barriles diarios, frente a los 2.6 millones del mes pasado, dijo.
Dado que Estados Unidos también entrará pronto en el invierno, el aumento de la demanda en el extranjero supondrá una mayor competencia para las refinerías estadounidenses. El huracán Ida ya ha provocado una pérdida de 30 millones de barriles en el suministro local, y parte de la producción no se recuperará hasta el próximo año.