El presidente chino, Xi Jinping, mantuvo este lunes varias reuniones con homólogos africanos recién llegados a Pekín para participar en el Foro de Cooperación China-África (FOAC), un encuentro con el que China buscará afianzarse aún más en ese continente y diversificar el comercio entre ambas partes.
Al menos 50 jefes de Estado y de Gobierno africanos visitarán la capital china esta semana para asistir al foro, según la Cancillería china.
Las reuniones de hoy estuvieron marcadas por las promesas chinas de inversión en el continente: en un encuentro con el presidente de República Democrática del Congo, Félix Tshisekedi, Xi se comprometió a “profundizar la cooperación en materia de agricultura y procesamiento de minerales” para ayudar al país en su desarrollo, recoge el Ministerio de Exteriores chino en un comunicado.
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La República Democrática del Congo suministra a China más del 60% del cobalto que precisa, un componente clave en las baterías para vehículos eléctricos y dispositivos electrónicos, lo que la convierte en un actor clave en la transición del gigante asiático hacia la energía verde.
Reuniones “relámpago” para elevar lazos
Xi también se entrevistó hoy con los líderes de Yibuti, Comoras, Mali y Togo en “reuniones relámpago” en las que China y estos cuatro países elevaron sus respectivas asociaciones bilaterales al nivel de “asociación estratégica”.
También se reunió con el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, tras lo cual ambas naciones ascendieron sus lazos a la categoría de “asociación de cooperación estratégica integral para la nueva era”, un nivel más alto en el escalafón chino.
Ismail Omar Guelleh, presidente de Yibuti, aseguró a Xi que su país espera “fortalecer la comunicación y la colaboración en la actual situación internacional y regional” para “promover la seguridad y el desarrollo regionales”.
Esta nación del Cuerno de África alberga la única base naval china en alta mar, una preocupación creciente en Occidente a medida que Pekín trata de afianzar su influencia en África y Oriente Medio.
Encuentro con el presidente interino de Mali
En una reunión con el coronel Assimi Goita, presidente interino de Mali, controlado por la junta militar, Xi dijo que “China apoya la autodeterminación del pueblo africano a la hora de decidir su destino futuro”.
Goita, según la Cancillería china, elogió la posición de Pekín de “oponerse a la interferencia en los asuntos internos de otros países”. Asimismo, prometió “profundizar la cooperación económica y de seguridad”.
Estas reuniones preceden a la nueva edición del FOAC, un mecanismo de diálogo entre China y África que se inició en Pekín en 2000 y que este año tendrá el lema de “darse la mano para promover la modernización” entre ambas partes.
El foro contará con una cumbre empresarial, según la cadena estatal CCTV, que aseguró que el evento concluirá con dos documentos, una “declaración” y un “plan de acción” para guiar la cooperación entre China y África durante los próximos tres años.
Desde aquel 2000, el FOAC ha ganado importancia hasta convertirse en un evento prioritario que acoge a delegaciones de alto nivel de todos los países africanos, a excepción de Esuatini (antigua Suazilandia), que mantiene lazos con Taiwán y no con China.
China ha sido el mayor socio comercial de África durante los últimos 15 años, con un volumen comercial que en 2023 alcanzó un récord de US$ 282,100 millones de dólares.
No obstante, algunas voces también han criticado la estrategia del gigante asiático en el continente por las llamadas ‘deuda-trampa’ ante el supuesto uso estratégico de la deuda para hacer a los países de África cautivos de los deseos y demandas de Pekín.
El déficit comercial de África con China se amplió el año pasado a US$ 64,000 millones, si bien la brecha se redujo en la primera mitad de 2024 gracias al rápido crecimiento de sus importaciones desde África.