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La segunda temporada de pesca industrial de anchoveta correspondiente al 2022, que se inició en noviembre último en la zona norte centro del litoral, concluyó esta semana con una captura de menos del 90% de la cuota asignada por el Ministerio de la Producción.
Hasta el último domingo se habían descargado 1´916,641 toneladas métricas de anchoveta, fecha en que este ministerio dispuso la culminación de esa temporada de pesca.
Así lo informó Jesús Véliz, presidente de la Asociación de Conserveros del Perú, que indicó que esa cifra significa que se capturó el 84% de la cuota total de anchoveta, que fue fijada en 2.283 millones de toneladas.
Al respecto, Luis Icochea, investigador de la Universidad Agraria La Molina, indicó que no se pudo completar la cuota debido a la alta presencia de ejemplares juveniles de la anchoveta, y cuya pesca está prohibida.
De esta forma, en las dos temporadas de pesca industrial de anchoveta correspondientes 2022 se han capturado un total aproximado de 2.24 millones de toneladas métricas de ese recurso, para la producción de harina y aceite destinado a la exportación.
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En tanto, ComexPerú informó que las exportaciones del sector pesquero en el 2022 sumaron US$ 3,950 millones, lo que supone un crecimiento de 3.58% con respecto al periodo 2021.
Fijan cuota para pesca de jurel y caballa
De otro lado, el Gobierno aprobó el límite para la pesca de jurel y caballa para consumo humano directo correspondiente al año 2023. Cabe señalar que los cardúmenes de ambos recursos suelen ocupar el mismo hábitat y desplazarse juntos.
En el caso del jurel, la cuota es de 144,000 toneladas, de las que cerca de 65,000 toneladas podrá ser pescado por la flota de mayor escala (industrial), y el resto por la flota de menor escala. Igualmente, aprobó una cuota para la pesca de caballa de 53,000 toneladas.
En tanto, en su pronóstico hasta febrero, el Enfen, señala que se prevé que continúe la disponibilidad de bonito, jurel, caballa, perico y otros recursos oceánicos en el mar peruano.
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Además, avizora que el calamar gigante o pota mantendrá su mayor abundancia y disponibilidad, principalmente en la zona norte del litoral.
Buenas condiciones para pesca de consumo humano
Al respecto, Véliz indicó que la cuota asignada de jurel y caballa y las buenas condiciones climáticas y oceánicas previstas para este periodo para estos y otros recursos marinos, hacen vislumbrar una buena disponibilidad para la industria pesquera de consumo humano directo.
Ello ocurre, a diferencia de años anteriores, en los que el fenómeno La Niña -caracterizada por reducir la temperatura marina a niveles debajo de lo normales- más bien había alejado a recursos como jurel y caballa, o dificultado su captura.
Por su parte, el presidente del Comité para el Manejo Sustentable del Calamar Gigante (CALAMASUR), Alfonso Miranda, indicó que están solicitando ante la Organización Regional de Ordenamiento Pesquero del Pacífico Sur (OROP-PS), una mejor regulación internacional para la pesca de pota, a fin de que no se afecte su captura en el Perú.
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Indicó que en la sesión de la OROP-PS, que se realiza en estos días en el Ecuador, se discute el hecho de que China estaría incumpliendo con su obligación de permitir la inspección a su flota pesquera dedicada a la pesca del calamar gigante en Sudamérica.
Aseguró que el incumplimiento de tal obligación podría facilitar la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada de este recurso, que es el segundo en abundancia en el Perú, después de la anchoveta.
