La Cámara Peruana de Comercio Electrónico (Capece) indicó que este canal de ventas podría contribuir significativamente con reactivación económica durante la pandemia, por ser la principal alternativa para evitar el corte en la cadena de pagos en muchos sectores económicos y al mismo tiempo proteger la salud de los ciudadanos.
En esa misma línea, sostuvo que el comercio electrónico permite que muchas más personas permanezcan en casa, y se abastezcan de alimentos, productos de primera necesidad y otros rubros como electrodomésticos, tecnología y hogar, entre otros, mediante la entrega a domicilio.
Asimismo, recordó que el comercio electrónico en el país incluye una amplia gama de categorías y sectores, tales como supermercados, farmacias, retailers, galerías de venta de equipos de cómputo para el teletrabajo y teleeducación, entre otros, que en conjunto han crecido a una tasa promedio anual superior al 30% en los últimos años. Sin embargo, la categoría de reparto a domicilio de restaurantes representa menos del 1% de este universo.
En cuanto a las regiones del país donde se desarrolla el comercio electrónico, la Capece sostuvo que el 60% se concentra en Lima Metropolitana y el 40% en el resto del país.
Bajo estas premisas, la Capece propuso que el Gobierno tome siete acciones con el fin de que el comercio electrónico pueda contribuir con la reactivación económica, la generación de empleo de calidad y el impulso de la microempresa, así como con la seguridad sanitaria en el país.
1. Autorizar el traslado logístico de productos adquiridos mediante canales de comercio electrónico sólo a empresas con capacidad de cumplir con los protocolos sanitarios dispuestos por el Ministerio de Salud (Minsa), en las actividades de embalaje, manipulación y entrega de los productos, incluida la eliminación de la aglomeración de agentes de recojo en zonas de la ciudad con una alta densidad de compras electrónicas.
2. Crear una mesa de trabajo público-privada para la estandarización de protocolos de bioseguridad para una logística de contacto cero en toda transacción de comercio electrónico, incluidos los procedimientos para el cuidado de la salud de los agentes de recojo y el adecuado tratamiento de los paquetes en cumplimiento de la normativa vigente aplicable a los operadores logísticos.
3. Fortalecer los mecanismos de supervisión permanente del cumplimiento de dicha política a cargo de las autoridades correspondientes, bajo responsabilidad de los operadores a cargo del traslado físico de los productos adquiridos a través de canales de comercio electrónico.
4. Sustituir el uso de dinero físico por alternativas de dinero electrónico que permitan el cumplimiento de la distancia social entre agentes de distribución y clientes de comercio electrónico.
5. Acelerar la transformación digital de la microempresa mediante la masiva adopción formal del comercio electrónico, a través de programas de capacitación, difusión y transferencia tecnológica y el aprovechamiento de su economía de escala para el desarrollo de nuevos negocios.
6. Crear incentivos tributarios para facilitar el acceso a internet en las microempresas.
7. Promover la formalidad y la generación de empleo de calidad, mediante mecanismos de contratación laboral que faciliten la absorción de empleo en industrias cuya actividad económica es seriamente afectada por el Covid-19.